viernes, 30 de diciembre de 2011
¿Y a mí que me trajo el año que se va?
Normalmente solía hacer estos recuentos el día 31, luego, por algunos años, deje de hacerlos. Hoy, por alguna razón me da por hacerlo... y en día 30, lo cual me lleva a una de las cosas que este año viejo me dio: EL DESARRAIGO DE LAS TRADICIONES.
Para algunos pueda sonar triste, para mí fue cosa de supervivencia: una persona tradicionalista es inflexible con tal de que las cosas se cumplan como la tradición implica, se impide vivir nuevas experiencias que le pueden dar crecimiento y sabiduria con tal de guardar la tradición, y más que nada, se olvida que lo más importante de una tradición se lleva en el corazón y esto es... su significado.
Sin querer, también, tuve que pensar en significados, cuando, por azares de la vida "perdí" lo único a lo que me había aferrado estos últimos 10 años. Pongo "perdí", entre comillas, porque para perder algo tiene que ser de tu propiedad y una persona no es algo, así pues, es imposible poseerla. Por otro lado "perder" implica que hayas hecho algo para que esto sucediera o pudieras haberlo evitado, como cuando pierdes tu celular en el transporte público porque lo pusiste en la bolsa del pantalón en la que sabías no cabía. Yo no perdí a la persona que significo tanto para mi estos 10 años: porque nada podía haber hecho para que no se fuera... y esta sola última frase fue la que me costo tanto trabajo comprender durante los primeros meses de este año.
Pero como dije, pense en significados... y me encontré cuestionandome que significaba mi vida, ¿qué significaba que yo creyese -aún y fervientemente- que el sexo debía ser acompañado del amor? ¿qué significaba que yo siguiera, como dice la canción "en el lugar de siempre, en la misma ciudad y con la misma gente"? ¿Que significaba que tuviera tanto miedo de salir a la calle, de construir un futuro distinto al que me habia planteado durante algunos años? Encontré que significaba -al menos para mí- que no quería vivir.
Y fue extraño porque anteriormente fui criticada por vivir tanto, pero creo que esta fue la razón por la que ya no quise hacerlo, la critica. Me hubiera gustado mostrarle a quien me criticaba que su critica provenia de la envidia y que para reparar esto podía él tambien vivir... En fin, que sí yo no logré que lo viera fue porque esas cosas las tiene que descubrir uno mismo.
Ante esto, como quien camina en espiral creyendo que camina en círculos, y como justamente camina en espiral, avanza, me encontre de pronto ante un muro que me dio la única alternativa de caminar hacia otro lado y vivir. Entonces comenzó la parte más chida de este año, la que me deja con este excelente sabor de boca que aún no sé distinguir ¿es dulce? ¿es ácido? ¿es agridulce? La verdad sólo puedo definirlo como desconocido.
En esa parte encontré conocimiento y retos, independencia ecónomica, aprendizaje, nuevos amigos y por lo tanto diversas nuevas formas de ver la vida que me hacen sentir rica. Sin embargo encontré que una "nueva vida" no significa dejar lo anterior atrás y/o evitarse el dolor...
Pensé que esta "nueva vida" que comencé a vivir este año que se va, era vivir la línea de vida que me negué a vivir hace años, y como solía hacer en esos años podría dejar de ser lo que era y reinventarme para tomarme las cosas siempre a la ligera, pero... me hice de una amiga a la que comencé a querer mucho y con la que quería contar por muchos años... pero la "perdí" y me dolio. Pensé tambien que podía relacionarme con la gente y no involucrarme, pero lo hice y me agrado.
Tambien pensé que esta vez podía ser la galana de barrio que siempre había querido ser, para andar con una y otra y otra al mismo tiempo o una después de otra y tampoco lo logré, cabe decir que lo intente pero sinceramente la gente me importa mucho, por otro lado descubrí que en realidad las relaciones convencionales no son para mí: esas que quieren marcar su propiedad desde el principio (como si las personas fueramos ganado), esas que prometen fidelidad por enfrente y atrás ya les están poniendo el cuerno a su pareja, esas que quieren obligar al otro a hacer tal o cual cosa, o lo esperan -por tradición- sólo por que son pareja: últimamente me hacen vomitar de tan solo verlas. Creo que este año reforcé mi repulsión a la hipocresía.
Eso me lleva a mi soltería. Agradezco mi soltería de este año, es la primera vez que la vivo como tal: este modo de voltear a ver a 'x' o 'y' y hacerme una fantasía sexual instanea sin sentir culpa de que no sea mi pareja; o esta manera de decidir irme a tal o cual lado sin pensar en decirle a alguien para que lo tenga en cuenta como si le estuviera pidiendo permiso; este modo de hacer las cosas por mí y para mí que en mis años de preparatoria no valoraba tanto porque no había conocido otro estado que no fuera "sin pareja", ahora que ya conozco el de "con pareja" agradezco mi soltería, aunque eso aunado al párrafo anterior me lleve a pensar en la persona con la que me gustaría compartir mi vida cuando esté lista. Si el año nuevo me lo concede quiero que sea una persona autosuficiente economica, sentimental y mentalmente hablando, tal y como yo aspiro a ser; una persona inteligente y sin temor a expresar sus opiniones; una persona abierta a nuevas ideas y nuevas maneras de hacer las cosas así como dispuesta a probarlas y aún con esto defensora de un ideal; congruente en toda ella: que sus pensamientos, sentimientos y acciones concuerden entre sí; una persona "luchona" que aunque conozca la derrota busqué siempre levantarse; y... ante todo una persona que realmente quiera COMPARTIR su vida con la mía.
En fin... que sí esta persona no llega este año no importará: mucho se dice que se nos acabará el mundo así que aunque se vale soñar, la razón por la que me es preciso dibujar a esa persona es porque aspiro a ser su igual, de modo que, al pintarla a ella me estoy pintando a mí y eso es lo que más vale para mí en este año que se apróxima. Ojalá que me llegué una persona así, de verdad, pero si llega o no yo debo continuar creciendo y para eso ya tengo algunos "planes"... y digo "planes" porque a mí no me gusta planear, me gusta más prevenir (si pasa esto hago esto, si para esto otro hago algo más)...
Y bueno, antes de terminar con este recuento, quiero mencionar, que entre esas cosas que me traje a esta "nueva vida" está la amistad de ese alguien que "perdí" a principios de año. La verdad no sé como vaya a resultar, ni si él quiera llamarla amistad: realmente es un término muy nuevo entre nosotros, pero vale la pena dejarlo ser ¿o no?
Para terminar, por tanto, solo me resta decir que lo que me trajo este año que se va es la certeza de lo arbitrario que es pensar que una cosa se termina para traernos algo enteramente distinto, como pensar que este año dejarás de ser lo que siempre has sido o que justamente tengas que dejar de serlo -o comenzar a serlo- en este punto que todos llaman "nuevo": Tú eliges que dejar y que llevarte, como llevartelo y en que punto, tú eliges cómo, qué y cuando cambiar. Lo que será, será de acuerdo a tus decisiones de cada momento, así que mis deseos para ti que me lee es que dejes de justificarte por las cosas que dejaste de hacer para este año que se va: si no lo hiciste y te lo habias propuesto por los tradicionales propósitos y solo por ellos, la realidad es que no era lo que realmente querías, si cometiste un error que te chingo en muchos aspectos y ahora quieres pensar que fue el año viejo el de la culpa solo mirate en el espejo y date cuenta que el que saltará al año nuevo eres tú y que esos defectos y virtudes que te conforman saltarán contigo y repetirán (si tú no decides algo distinto) los mismos errores que te chinguen en los mismos aspectos que ya te chingaron. Cultivate, enseñate, retate, cambiate... que el "nuevo" seas tú.
Feliz año 2012.