Y a petición del público... feliz no cumpleaños:
Que los cumplas feliz y tus deseos se hagan realidad...
jueves, 28 de abril de 2011
martes, 26 de abril de 2011
Amigo, amiga, la resignación no deseada, razones y el año célibe
En efecto... hay días en que me es más complicado venir a escribir. Quizá no porque no tenga tiempo... en realidad lidio más conmigo misma: con la espera a que me llegué la inspiración y la paciencia pero más la claridad -y la tranquilidad-, también lidio con las pequeñas cosas que no salen como quiero, síntoma -único tal vez- de mi casi desaparecida obsesiva compulsión, donde, para que una cosa se haga deben forzosamente haber sucedido una cadena de cosas, en la que si una cosa falla entonces nada puede suceder y debe renunciarse a aquello que se tenía planeado. Sobre esta casi desaparecida compulsión mía... supongo debo trabajar: es enemiga de la disciplina y la fluidez, pero... pues... ahí está. Ahora que lo analizo debe ser justamente esa compulsión la que me hace necesitar a la inspiración, la paciencia, la claridad y la tranquilidad... cuando simplemente no las tengo y entonces dejo de hacer lo que estaba haciendo o lo dejo pa después... Mmmh...
En fin... ahí mi justificación de por qué no he venido a escribirte -lo que se dice escribirte- en los últimos 13 días... El asunto es que tú podrías justificarme, decir, no pasa nada, total, soy sólo un diario en línea, el problema es que mientras esto me pasa con tal de no reconocer que estoy cayendo en un vicio que tengo desde mi niñez (la compulsión) me justifico diciendo que "tal vez sea momento de dejar de ordenar mis asuntos y comenzar a actuar porque en realidad ese 'orden' nadie lo va a notar, lo que van a notar son mis acciones, el comenzar a salir, a conocer gente, cambiar mis costumbres, mi vida: sólo así la gente va a decir, eh!!! Gabriela lo ha superado!!!".
Pero no. Ese también es un vicio, de hecho, dicho sea de paso, es un vicio que la gente te malcría: A poco no, cuando cuentas una y otra vez un mismo problema y le das vuelta a un sólo asunto, la gente termina meneandote la cabeza negativamente y te dice cosas como "ya superalo..." "ay, o sea, wey, eso ya está en el pasado" (a veces sólo ha pasado una semana de que sucedio y ellos ya lo quieren enterrar), "oh, que la... ¿sigues con la misma cantaleta?" "sal y consiguete una vida" (ya tengo una!!!) "deberías de salir a buscarte una nueva pareja, ese wey -esa vieja- no merece tus lágrimas".... Cosas de ese estilo, te aseguro que sabes de lo que te hablo y lo que puedes hacer para identificarlas es que te des cuenta que todas tienen en común que te impiden darte cuenta de por qué una idea o un suceso te ronda una y otra vez en la cabeza, por tanto te impiden sacarlo de tu sistema y/o reparalo, no se hable de que necesites desahogarte: cómo te impiden llorar -con el pretexto de que el otro u otra no se lo merece- te impiden darte cuenta de tu tristeza, de cuanta es y qué la causa, por tanto no puedes ni trabajar en la causa y justamente hacerla menos ni mucho menos desaparecerla.
En resumen: esas ideas tienden a menospreciar las causas de los sucesos y por tanto los resultados de ellas, pero peor que todo eso es que te menosprecian a ti: menosprecian el cómo te sientes, tu capacidad de identificar qué y por qué te duele (la capacidad de identificar el problema) y tu capacidad de salir del atoyadero. Te crean la incapacidad de resolver
El resultado de manejarte con este vicio malcriado por la gente es que si tomas sus "sabios consejos" acumulas más problemas. Es mentira que el hecho se quede en el pasado si te consigues algo nuevo que lo tape (nuev@ novi@, nuevo empleo, nueva vida...) : si nunca te das cuenta de aquello que provoco el desmadre anterior que quieres enterrar con "lo nuevo" seguirás recreando el patrón que te condujo al problema que tapaste, por tanto al poco rato no sólo irás arrastrando malestares sino que hasta olvidarás la raíz del asunto: nunca tendrás conciencia (decir autoconciencia sería redundante?).
En fin que este no es un discurso que no me hayas escuchado decir antes, pero ya sabes que me choca dejar alguna duda. Volviendo a lo que me trajo a escribir hoy y aunado a todo lo que te acabo de decir... bueno... he estado pensando mucho en lo último que te dije en la entrada Un desahogo más. Ando luchando con mi necesidad de ponerme todo en claro y en orden y mi vergonzosa necesidad de llorar, cantar canciones de despecho y hablar mal de Juan... Dificíl cosa, porque creo fervientemente que en cuanto ponga las cosas en orden dejaré de hablar mal de Juan y sabes? Eso me causa pesadez.
Creo que el problema sobre esto son dos cosas: gozo echandole -interiormente- toda la culpa porque es demasiado responsable de todo lo que nos paso y que a su vez él me culpa a mí, ¿por qué chingados yo no habría de culparlo totalmente a él? Pero sé que no debo porque yo también contribuí con mis cosas a que esto se jodiera, el punto es que cuando yo termine de atribuir a cada quien su responsabilidad, cuando yo termine de ordenar quien hizo qué primero y por que lo hizo... no sólo dejaré de hablar mal de Juan: ya no me quedará más pretexto para hablar de él.
De hecho ya me está pasando: una cosa es que no pueda venir a contarte las cosas, escribirlas y guardarlas en su respectiva gaveta y otra que no sepa la naturaleza de las cosas. En mi cabeza tengo todo el análisis hecho, y supongo (creo que muy certeramente) que nos llevo a qué y como será nuestra vida de ahora en adelante (o al menos como estamos planeando nuestra vida de ahora en adelante), pero no quiero escribirlo porque estoy conciente que no quiero dejarlo atrás, no quiero superarlo porque entonces, con todo en la mesa ya no tendré más pretextos para resignarme y me veré obligada a desistir de esperar a Juan.
No sé si me entiendas... pero mi espera de él realmente no depende de él, de cuanta jalada haya hecho, de cuantas cosas me haya dicho o le haya dicho a otros de mí, no, no depende de él: depende de mí. No sólo de mi autovaloración que llegué a resolver que yo merezco a "alguien mejor", no sólo de la creación de una soberbia en mí que diga que "él no me dejo nada" (lo cual sería una mentira), no, depende de que yo con todo el amor que aún siento por él lo perdone, sí, pero decida dejar de buscarlo... y eso nomás no está pasando.
Aún me meto en las estadísticas de mi blog sólo para localizar las visitas desde E.U, aún me meto a facebook para ver la recomendación del sistema de que lo agregue como amigo y así de menos ver su imagen de perfil y tener la certeza de que sigue vivo, y lo último de estas acciones patéticas fue dejar automatizado mi Skype para que inicie sesión cada vez que enciendo mi laptop y al menos verlo conectado o en buzón de voz. No chateo con nadie desde ese programa, es más no lo tenía en mi laptop: le preste un día la compu a Carmen y estando con Cesar éste quiso platicar con alguien que está habituado al programa así que lo instalaron... En fin... no me molesto, pero fue malo para mí porque no resisti la tentación de asomarme dentro. No recordaba ni la contraseña de la cuenta y estaba segura que Juan me habría eliminado y por tanto en su usuario aparecería su correo como en msn o de plano simplemente no estaría. Al principio solo aparecía su usuario, por lo que pensé que en efecto, me habría borrado de ahí también, pero un día aparecio distinto: en buzón de voz y al siguiente aparecia con su nombre como tal... mmmh... lo deje, hasta que sin esperarmelo hace como unos 8 días me llego el aviso de que iba conectandose :S
Obviamente no le hable... él tampoco, pero su nombre siguio apareciendo en verde. Desde entonces sólo he entrado para ver si esta en verde o en blanco y ayer incluso caí en la debilidad de felicitarlo por ahí (mal por mí). Hoy quite la automatización de la entrada del Skype. Pienso que ahora que te cuento esto no tardará en leerlo y la próxima vez que entre de pura casualidad al programa él ya no aparecerá, señal de que me ha borrado. Por que sabes? Creo que ni el mismo se ha dado cuenta de que estoy ahi: puede haberme borrado pero yo sigo viendolo conectado por error. Como sea, confesandote esto dudo que vuelva a verlo en verde... Me he quitado el gusto y me he vuelto a poner otro muro, y bueno si es así por algo será: lo más probable es que no deba hacer este tipo de cosas, lo más probable es que debo resignarme y pues ya...
De pronto el año que decidí darme de tiempo me resulta eterno. A veces quisiera ya haberlo pasado y saber en quien me convertiré, ahorrarme todas estas confesiones, las duras y las patéticas, y saber que voy a estar bien, saber que mi vida es sana, alegre, que no le debe nada a nadie y que a ella no le deben nada...
Como te dije hace dos entradas, llevo pidiendo este año por un buen tiempo, al menos poco más de dos años. La razón? Bueno... pues tenía suficientes problemas con Juan y Berenice y le sume los que tendría -tuve- con Carmen. En aquél tiempo les pedi a Berenice y a Carmen que me dieran un año, un año para poner en orden mis sentimientos y que fueramos amigas solamente, pero sabes? Había tantos sentimientos a flor de piel que aquello fue imposible: el resentimiento, culpa, busqueda de refugio, amor herido y etc, etc, no permitieron que yo me tomará ese año, aún seguí pidiendolo por todo ese santo año. Jeje
A Juan no se lo pedí inmediatamente porque en ese tiempo quedamos tan molestos el uno con el otro que ni él me buscaba ni yo lo hacia y menos quería que él lo hiciera, pero pasó el enojo y hace casi un año recibí noticias de él para volver a entablar conversación. Seguimos sin resolver nuestros problemas, nuestros enojos y las razones de estos, que en ese momento yo había metido más que él... la cosa fue que aún así él quería estar conmigo y yo lo "paré en seco" diciendole que en aquél momento sólo podíamos ser amigos...
Fue horrible... Me dio la impresión que lo que había dicho era peor que una mentada, pero yo sabía porque se lo pedía: había pasado un año tratando de contener el derrame de una presa que estaba a punto de desbordar después de tanta tormenta... y simplemente no quería poner más presión a aquello. Quería llevarme las cosas con Juan en calma, porque había dos problemas fundamentales en aquél entonces que metimos cada uno: en principio él se le había declarado a M (sí! fue desde hace un año!) y yo le había dicho "sí" a Carmen cuando me pidio casarme con ella (!!!).
Para el momento en que Juan volvió a hablarme y a plantearme una relación yo acababa de decirle a Carmen que "la verdad siempre no" (tema para otra entrada). En realidad habia hecho poquito más de un mes, pero seguía sufriendo las consecuencias de mi "echada para atrás" (y las seguí sufriendo por varios meses), la verdad era muy poco tiempo y lo siguio siendo, porque ni Juan ni yo entendimos que realmente esas dos variantes, bronquitas o como quieras llamarles, eran lo suficientemente grandes para chingarnos, y al poco tiempo de pedirle nos la llevaramos con calma (lo cual era para mi la definición de amigos) comenzamos a apresurarnos.
Los dos, me parece ignoramos para nosotros mismos que el problema que el otro había metido era grande. Juan pensó que podía hacer menos a Carmen y yo menos a M tal fue que yo jamás me imagine que Juan platicará con M con tanta soltura y recurrencia que a ella le pudiera gustar él y él terminará teniendo más curiosidad por tener una relación con ella; y Juan a su vez jamás imagino que aunque yo no quisiera más una relación de pareja con Carmen me iba a ser dificil salir de los chantajes, las culpas y reclamos y por tanto de todos modos él lo padecería.
Yo a estas alturas podría echarle muchas culpas: que sí mientras trabajaba los problemas conmigo, perreaba a M, que si me engaño... Y él puede -y lo hace- decir que " a mí me importaba más Carmen que él" (mentira vil) o que nunca estaba para él... pero la realidad es que nuestros problemas se remiten al día en que yo le pedí que fueramos amigos, él se lo tomo a mal, yo quise que entendíera que lo que yo necesitaba era tiempo para poner en orden mi vida pero que lo amaba, él de esa frase sólo tomo la última parte, yo lo permití y los dos comenzamos a hablarnos con amor y ternura, hasta que entendimos que eramos "novios", comenzamos a tratarnos y a exigirnos como tal, nos jodimos y nunca nos dimos el tiempo de que cada uno estuviera claro y en paz: NO SUPIMOS SER AMIGOS, NI TENERNOS PACIENCIA, NI QUISIMOS ESPERARNOS MUTUAMENTE PARA NO DAÑARNOS Y NO DAÑAR AL OTRO...
Je... creo que acabo de descubrir por que me molesto que él le dijera a Carmen que "poco a poco él y yo nos habíamos convertido en amigos". Desde hace un tiempo había descubierto parte de esa molestia, de hecho fue esto lo que me llevo a escribir la entrada "Amiga", cuando la escribí: me molesto que dijera que eramos amigos cuando yo en realidad nunca me di cuenta como fue que "eso" pasó, me sentí descalificada, me sentí menos mujer, me sentí usada y me sentí engañada, pero más que nada me sentí no tomada en cuenta y atacada, como que él buscaba una venganza de justamente ese día en que yo le pedí que fueramos amigos: cuando leí aquella cosa vi como esa idea de él, cuando yo le pedi que fueramos amigos, de menosprecio, , esa idea, jamás se le quito. Fue un dolor que llevó rodando por todo el camino escondidito porque no quiso entender por que le ofendio y entonces en el momento propicio me ataco con ese dolor para que yo sintiera lo mismo que él había sentido. Sí, cuando leí eso fue como ver una bolota de nieve desde lo alto alto, que él había estado rodando lentamente hasta encontrar el momento para lanzarmela: como si "amigo" fuera realmente un insulto.
Pero, sabes ? Lo fue. Dicho desde el punto en que él lo hizo y el modo en que él lo hizo, fue un insulto. Y sabes? Creo que a estás fechas ni siquiera sabe porque quiso hacerme sentir así. Yo sé que fue venganza, en este momento me doy cuenta, pero yo no pretendía lastimarlo en aquél entonces como para que él quisiera ir acumulando su rencor. Yo quería tener paciencia de él, llevarnos las cosas con calma, entendernos, apoyarnos sin exigirnos y pedirselo más que menosprecio era una muestra de alta estima y de mucho amor, porque pensaba que poder tener esa calma sin exigirme tenía que demostrar que él era un hombre grande, capaz de posponer un poco su bienestar en pro del bienestar de a quien amaba. Yo lo creía tan grande, que creía que era capaz de ser mi amigo, era algo muy difícil siendo que él de mí requería mi atención, pero te imaginas? La idea que yo tenía de él era que estaba más allá del egoísmo: él era un hombre inmenso... Aunque al parecer él no creyo que yo lo viera así.
La razón por la que ahora puedo aegurarte que él lo hizo en venganza y como insulto es la gran diferencia de como sucedieron las cosas. Mientras yo le pedí "sé mi amigo","seamos amigos", teniendo en mente que si él lo aceptaba y lo era iba a convertirse en un hombre con mucho más valor,y le di la opción de elegir... él de la noche a la mañana me bajo del estado de "el amor de su vida" a "tan sólo una amiga": de la noche a la mañana!!! Mientras él aseguraba que había sido poco a poco, ¿cómo fue y no entere? ¿No tenía yo el suficiente valor para él para poder elegir ser o no ser su amiga? ¿Él no me pensaba una persona tan grande como para serlo, como para elegir ser su amiga si él me lo pedía porque lo necesitaba? La amistad se elige, amigo, no se endilga...
¿Y por qué te digo esto? (el que la amistad se elige no se endilga) porque tu amigo, tu verdadero amigo, siempre te va a decir que lo es porque esa es su intención para contigo... La amistad es resultado de un amigo más un amigo, es decir, ambas personas tienen que tener la intención hacia el otro de amistad: de otro modo lo que se tiene es otra cosa. Hay amigos que se dicen amigos pero tienen la intención de cogerte, tener una relación de pareja contigo o de tomar de ti lo que les sirva (dinero, posición, ideas, tu trabajo), cual sea la intención si no tienen la de amistad por mucho que se digan amigos para contigo, entre ustedes no existe una amistad, aún cuando tú si tengas la intención de amigo. Lamentablemente todos nos manejamos por nuestras verdaderas intenciones no por nuestros dichos: son las verdaderas intenciones las que siempre salen a relucir aunque nos empeñemos en decir algo contrario para taparlas.
Basado en esto yo te puedo decir que la intención de Juan para conmigo en ese tiempo que dijo que él y yo nos habíamos convertido poco a poco en amigos no era de amigos a pesar de su dicho. Su intención era encelarme para sentir que aún gozaba de mi amor, ¿y como puedo asegurarte esto? Porque seguía diciendome que M era menos que yo o que simplemente no le nacia con ella todo lo que le nacía conmigo, al tiempo que hablaba de como se la pasaba con ella. Eso a mí me causaba un corto circuito, y terminaba mimándolo pero sin poder dejar de lado que al parecer se divertía con ella. La intención de Juan también era sentirse amado por ambas partes... ¿por qué? Eso preguntasélo a él. Si me preguntas a mí solo podrás obtener una suposición: a la fecha no ha sabido reconocer su valor por si mismo tanto que requiere que otros se lo digan y entre más sean estos otros, mejor, porque él seguirá menospreciandose... Tristemente eso es lo que yo supongo.
Como sea, siguiendo en esto de la amistad, como te dije es una elección. Tengo la teoría de que se puede cambiar de intención si uno lo elige, así pues yo por ejemplo con Berenice he decidio ya ser su amiga, ya tengo hacia ella la intención de amistad: quiero estar para ella, apoyarla, aconsejarla, poder brindarle ayuda cuando lo necesite ya sea en mano de obra, dinero, hospedaje, compañia, etc; demostrarle que cuenta conmigo para esto por medio de mis mensajes, o las contestaciones a los suyos y así: Quiero ser su amiga. Ya no tengo la intención de más, no me imagino una vida de pareja con ella, y sexualmente tampoco: fue tanto el daño que me hizo quitar eso de mi mente que realmente al pensar en una vida de pareja y en el sexo con ella siento rechazo, rechazo justamente a más daño, pero afortunadamente me quedaron las ganas de estar para ella y he elegido ser su amiga, y ella también al parecer. Aunque realmente nuestra amistad es muy reciente (nuestra intención de amigas mutua), sabes? Muchos la ven todavía con suspicacia, pero no es para menos, mucha historia por detrás, pero igual, lo que cuenta son nuestras intenciones.
Distinto esto todavía a con Carmen. Yo ya le expresé mi intención de amistad hacia ella. Al principio del año hablabamos de "amigos con derechos" (sexuales) pero al menos a mí eso no me funciono, tanto es así que llevamos poco más de dos meses (creo) de no tener relaciones sexuales, y es que mi intención hacia ella sobre esto ya no existe. Me decía al principio que todo era porque ella no era lo suficientemente atractiva físicamente, pero lo es, el asunto es que cuando se lo admití y reconocí que partes de ella eran atractivas, nos volvimos a meter en el embrollo sexual, cosa que en mí se tuvo que aclarar: en el momento que acepte mi intención de amistad hacia ella, aunque puedo reconocer que es atractiva (y que cuando adelgace lo será más), en mi no despierta la intención sexual porque ya mi intención es otra y en esa otra no cabe el sexo. Ahora bien... Carmen ya va aceptando que mi intención hacia con ella es la de amistad, aún no la acepta del todo, pero ya la va aceptando... el problema es que ella sigue teniendo otra intención hacia mí. Por tanto entre ella y yo aún no existe amistad, existen intenciones diferentes. ¿Entiendes mejor?
Ahora bien para cuando yo le pedi a Juan que fuera mi amigo, pretendía que nuestro rol de amigos, nuestra amistad, se sumara tarde o temprano a nuestro amor. ¿Has oído decir a las parejas que ellos además de parejas son amigos? Suena muy bonito, no? ¿Tú lo crees posible? Yo creo que sí, aunque en la práctica amar y ser amigos... resulte casi hablar de lo mismo. Te explico.
Se dice que el amar es dar. Yo con el paso de los años me he dado cuenta que cuando se ama se busca el bienestar de la otra persona, se le impulsa, se le motiva, se le reconoce, se le dan caricias, se le dan consejos, se le cuida, y así... todo, pensando en su bienestar. Si te fijas la definición parece muy similar a la que te di de la amistad, pero esto es lo que la hace diferente: el amor espera reciprocidad, además, en el amor a la pareja (porque existe amor a otros) siempre se espera sexo, no? Bueno... la cosa es que en la espera de esa reciprocidad quien ama se vuelve egoísta... Terminamos dando pero siempre esperando. Lo hemos vuelto un simple intercambio mercantil. No se supone que tenga que ser asi. Se supone que amistad y amor debieran ser lo mismo con la salvedad de que la primera carezca de sexo, la cosa es que como ha terminado siendo de otra manera en estos tiempos el amor tiene que recurrir a la amistad para controlarse, o más bien para recordar que podemos dar sin esperar tanto a cambio, más bien, dando por la simple razón de que queremos bienestar para el otro.
Yo quería eso con Juan. Quería formar amistad que se sumará con el amor... Quería que nos dieramos cuenta que ayudando a que él otro estuviera bien nos ibamos a ayudar a nosotros mismos, pero no lo logramos por que no tuvimos paciencia. Y bien dicen que lo que de prisa se hace lento se llora... Tuvimos prisa en sentirnos novios, en cumplirnos como tales y no construimos un lugar en donde cada uno se sintiera a gusto y no traer a nuestra relación cosas que no venían al caso.
En fin... que es desde entonces que yo he querido este tiempo. Como te dije quisiera ahorrarme estas largas entradas y mis patéticas y vergonzosas confesiones, pero no quiero ahorrarme mis análisis, esos me hacen bien, así pues creo que todo lo otro son gajes del oficio. Como sea voy a tomarme este tiempo como venga, pero eso sí, quiero cumplir con esto de no tener pareja y eso incluye a las parejas sexuales: voy a tener un año de celibato!!! Je... seguro que esto a la larga puede traer buen tema de conversación, por lo menos en lo que se refiere a pornografía... por que... la masturbación no cabe como relación sexual, o sí? jajajajajajajajajajajajajajajajajajajaja (bueno, tampoco es que lo haga mucho últimamente)... pero sí... Espero que esto del año te haya quedado un poco más claro ahora sí. Las razones para él y el por que esta vez si me lo voy a tomar en serio, sí, sí.
Cambiando de tema... ¿que te ha parecido el cambio de diseño del blog? Creo que a mí me gusta más. Le he agregado una lista de reproducción de videos: son del canal de mi hermano!!! Y el primero es un cortometraje que hace años le ayude a producir. Si no lo has visto, velo!!!! Conforme vaya subiendo más videos ahi los agregaré, de cualquier modo el enlace a su canal también lo incluí en la barra lateral izquierda por lo que en cuanto él suba un video igual se mirará como actualización de esa barra. Sobre la barra lateral derecha también puedes ver las actualizaciones de mis otros blogs... El de Partirme en 2 no lo puse porque realmente no he escrito mucho ahí aunque realmente la idea vale la pena, como sea... ¿recuerdas que te hable de proyectos con mi hermano? Se trata de proyectos de video y él ya tiene 3 guiones hechos, 3 ideas de series de las cuales me ha pedido escriba historias, sus primeros videos en youtube y su blog con sus escritos, el cual ya te he incluido como enlace en la barra lateral izquierda y en los enlaces de La otra parte , el blog de mi hermano es Libestod. Date una vuelta y comentale!!!
Yo por mi parte ya tengo mi primer guión como tal y otro que como más bien es una idea de un baile no sé si entra como guión, pero ya está. Todo lo demás son ideas para la etiqueta Recuerdos y exorcismos de la Bitácora indiferente que poco a poco está perdiendo su descripción y en los últimos días la siento cada vez más mía, tal que lo más probable es que me tome este día más a parte de los otros dos días anteriores por los que no he actualizado este blog... y es que ayer... iba a subir unas fotos de feliz cumpleaños que finalmente no me senti con derecho de subir por qué... yo ya no estoy incluída en esa vida, sabes? y aunque le etiqueta de "recuerdos" es justamente para ir curandome de este tipo de cosas sobre esto ya te ahondaré después...
Como sea, lo de los videos va, y mi hermano me esta motivando para aprender más de fotografía y para crear mi propio vlog e ir produciendo mis propias ideas con su ayuda y subirlas a mi canal. Sobre el vlog pienso que tal vez sería del tema de Partirme en 2 y así mato dos pájaros de un tiro o tal vez sería un vlog sobre los temas que aquí hablo. Lo único es que si soy un poco vanidosa y para hacerlos primero quiero bajar de peso, y para ello, bueno, la próxima semana ya me apunto para ir a nadar!!!! Yujuuuu... pero sí, así la cosa, ¿cómo ves?
¿Que video te pongo hoy para descansarte de tanta palabrería ? Oh! sí! Ya sé!!! Este que desde que baje la canción por recomendación de Juan me ha animado los días :D Disfrutala!!!
Te mando un beso!!!! Hasta la próxima!!!
En fin... ahí mi justificación de por qué no he venido a escribirte -lo que se dice escribirte- en los últimos 13 días... El asunto es que tú podrías justificarme, decir, no pasa nada, total, soy sólo un diario en línea, el problema es que mientras esto me pasa con tal de no reconocer que estoy cayendo en un vicio que tengo desde mi niñez (la compulsión) me justifico diciendo que "tal vez sea momento de dejar de ordenar mis asuntos y comenzar a actuar porque en realidad ese 'orden' nadie lo va a notar, lo que van a notar son mis acciones, el comenzar a salir, a conocer gente, cambiar mis costumbres, mi vida: sólo así la gente va a decir, eh!!! Gabriela lo ha superado!!!".
Pero no. Ese también es un vicio, de hecho, dicho sea de paso, es un vicio que la gente te malcría: A poco no, cuando cuentas una y otra vez un mismo problema y le das vuelta a un sólo asunto, la gente termina meneandote la cabeza negativamente y te dice cosas como "ya superalo..." "ay, o sea, wey, eso ya está en el pasado" (a veces sólo ha pasado una semana de que sucedio y ellos ya lo quieren enterrar), "oh, que la... ¿sigues con la misma cantaleta?" "sal y consiguete una vida" (ya tengo una!!!) "deberías de salir a buscarte una nueva pareja, ese wey -esa vieja- no merece tus lágrimas".... Cosas de ese estilo, te aseguro que sabes de lo que te hablo y lo que puedes hacer para identificarlas es que te des cuenta que todas tienen en común que te impiden darte cuenta de por qué una idea o un suceso te ronda una y otra vez en la cabeza, por tanto te impiden sacarlo de tu sistema y/o reparalo, no se hable de que necesites desahogarte: cómo te impiden llorar -con el pretexto de que el otro u otra no se lo merece- te impiden darte cuenta de tu tristeza, de cuanta es y qué la causa, por tanto no puedes ni trabajar en la causa y justamente hacerla menos ni mucho menos desaparecerla.
En resumen: esas ideas tienden a menospreciar las causas de los sucesos y por tanto los resultados de ellas, pero peor que todo eso es que te menosprecian a ti: menosprecian el cómo te sientes, tu capacidad de identificar qué y por qué te duele (la capacidad de identificar el problema) y tu capacidad de salir del atoyadero. Te crean la incapacidad de resolver
El resultado de manejarte con este vicio malcriado por la gente es que si tomas sus "sabios consejos" acumulas más problemas. Es mentira que el hecho se quede en el pasado si te consigues algo nuevo que lo tape (nuev@ novi@, nuevo empleo, nueva vida...) : si nunca te das cuenta de aquello que provoco el desmadre anterior que quieres enterrar con "lo nuevo" seguirás recreando el patrón que te condujo al problema que tapaste, por tanto al poco rato no sólo irás arrastrando malestares sino que hasta olvidarás la raíz del asunto: nunca tendrás conciencia (decir autoconciencia sería redundante?).
En fin que este no es un discurso que no me hayas escuchado decir antes, pero ya sabes que me choca dejar alguna duda. Volviendo a lo que me trajo a escribir hoy y aunado a todo lo que te acabo de decir... bueno... he estado pensando mucho en lo último que te dije en la entrada Un desahogo más. Ando luchando con mi necesidad de ponerme todo en claro y en orden y mi vergonzosa necesidad de llorar, cantar canciones de despecho y hablar mal de Juan... Dificíl cosa, porque creo fervientemente que en cuanto ponga las cosas en orden dejaré de hablar mal de Juan y sabes? Eso me causa pesadez.
Creo que el problema sobre esto son dos cosas: gozo echandole -interiormente- toda la culpa porque es demasiado responsable de todo lo que nos paso y que a su vez él me culpa a mí, ¿por qué chingados yo no habría de culparlo totalmente a él? Pero sé que no debo porque yo también contribuí con mis cosas a que esto se jodiera, el punto es que cuando yo termine de atribuir a cada quien su responsabilidad, cuando yo termine de ordenar quien hizo qué primero y por que lo hizo... no sólo dejaré de hablar mal de Juan: ya no me quedará más pretexto para hablar de él.
De hecho ya me está pasando: una cosa es que no pueda venir a contarte las cosas, escribirlas y guardarlas en su respectiva gaveta y otra que no sepa la naturaleza de las cosas. En mi cabeza tengo todo el análisis hecho, y supongo (creo que muy certeramente) que nos llevo a qué y como será nuestra vida de ahora en adelante (o al menos como estamos planeando nuestra vida de ahora en adelante), pero no quiero escribirlo porque estoy conciente que no quiero dejarlo atrás, no quiero superarlo porque entonces, con todo en la mesa ya no tendré más pretextos para resignarme y me veré obligada a desistir de esperar a Juan.
No sé si me entiendas... pero mi espera de él realmente no depende de él, de cuanta jalada haya hecho, de cuantas cosas me haya dicho o le haya dicho a otros de mí, no, no depende de él: depende de mí. No sólo de mi autovaloración que llegué a resolver que yo merezco a "alguien mejor", no sólo de la creación de una soberbia en mí que diga que "él no me dejo nada" (lo cual sería una mentira), no, depende de que yo con todo el amor que aún siento por él lo perdone, sí, pero decida dejar de buscarlo... y eso nomás no está pasando.
Aún me meto en las estadísticas de mi blog sólo para localizar las visitas desde E.U, aún me meto a facebook para ver la recomendación del sistema de que lo agregue como amigo y así de menos ver su imagen de perfil y tener la certeza de que sigue vivo, y lo último de estas acciones patéticas fue dejar automatizado mi Skype para que inicie sesión cada vez que enciendo mi laptop y al menos verlo conectado o en buzón de voz. No chateo con nadie desde ese programa, es más no lo tenía en mi laptop: le preste un día la compu a Carmen y estando con Cesar éste quiso platicar con alguien que está habituado al programa así que lo instalaron... En fin... no me molesto, pero fue malo para mí porque no resisti la tentación de asomarme dentro. No recordaba ni la contraseña de la cuenta y estaba segura que Juan me habría eliminado y por tanto en su usuario aparecería su correo como en msn o de plano simplemente no estaría. Al principio solo aparecía su usuario, por lo que pensé que en efecto, me habría borrado de ahí también, pero un día aparecio distinto: en buzón de voz y al siguiente aparecia con su nombre como tal... mmmh... lo deje, hasta que sin esperarmelo hace como unos 8 días me llego el aviso de que iba conectandose :S
Obviamente no le hable... él tampoco, pero su nombre siguio apareciendo en verde. Desde entonces sólo he entrado para ver si esta en verde o en blanco y ayer incluso caí en la debilidad de felicitarlo por ahí (mal por mí). Hoy quite la automatización de la entrada del Skype. Pienso que ahora que te cuento esto no tardará en leerlo y la próxima vez que entre de pura casualidad al programa él ya no aparecerá, señal de que me ha borrado. Por que sabes? Creo que ni el mismo se ha dado cuenta de que estoy ahi: puede haberme borrado pero yo sigo viendolo conectado por error. Como sea, confesandote esto dudo que vuelva a verlo en verde... Me he quitado el gusto y me he vuelto a poner otro muro, y bueno si es así por algo será: lo más probable es que no deba hacer este tipo de cosas, lo más probable es que debo resignarme y pues ya...
De pronto el año que decidí darme de tiempo me resulta eterno. A veces quisiera ya haberlo pasado y saber en quien me convertiré, ahorrarme todas estas confesiones, las duras y las patéticas, y saber que voy a estar bien, saber que mi vida es sana, alegre, que no le debe nada a nadie y que a ella no le deben nada...
Como te dije hace dos entradas, llevo pidiendo este año por un buen tiempo, al menos poco más de dos años. La razón? Bueno... pues tenía suficientes problemas con Juan y Berenice y le sume los que tendría -tuve- con Carmen. En aquél tiempo les pedi a Berenice y a Carmen que me dieran un año, un año para poner en orden mis sentimientos y que fueramos amigas solamente, pero sabes? Había tantos sentimientos a flor de piel que aquello fue imposible: el resentimiento, culpa, busqueda de refugio, amor herido y etc, etc, no permitieron que yo me tomará ese año, aún seguí pidiendolo por todo ese santo año. Jeje
A Juan no se lo pedí inmediatamente porque en ese tiempo quedamos tan molestos el uno con el otro que ni él me buscaba ni yo lo hacia y menos quería que él lo hiciera, pero pasó el enojo y hace casi un año recibí noticias de él para volver a entablar conversación. Seguimos sin resolver nuestros problemas, nuestros enojos y las razones de estos, que en ese momento yo había metido más que él... la cosa fue que aún así él quería estar conmigo y yo lo "paré en seco" diciendole que en aquél momento sólo podíamos ser amigos...
Fue horrible... Me dio la impresión que lo que había dicho era peor que una mentada, pero yo sabía porque se lo pedía: había pasado un año tratando de contener el derrame de una presa que estaba a punto de desbordar después de tanta tormenta... y simplemente no quería poner más presión a aquello. Quería llevarme las cosas con Juan en calma, porque había dos problemas fundamentales en aquél entonces que metimos cada uno: en principio él se le había declarado a M (sí! fue desde hace un año!) y yo le había dicho "sí" a Carmen cuando me pidio casarme con ella (!!!).
Para el momento en que Juan volvió a hablarme y a plantearme una relación yo acababa de decirle a Carmen que "la verdad siempre no" (tema para otra entrada). En realidad habia hecho poquito más de un mes, pero seguía sufriendo las consecuencias de mi "echada para atrás" (y las seguí sufriendo por varios meses), la verdad era muy poco tiempo y lo siguio siendo, porque ni Juan ni yo entendimos que realmente esas dos variantes, bronquitas o como quieras llamarles, eran lo suficientemente grandes para chingarnos, y al poco tiempo de pedirle nos la llevaramos con calma (lo cual era para mi la definición de amigos) comenzamos a apresurarnos.
Los dos, me parece ignoramos para nosotros mismos que el problema que el otro había metido era grande. Juan pensó que podía hacer menos a Carmen y yo menos a M tal fue que yo jamás me imagine que Juan platicará con M con tanta soltura y recurrencia que a ella le pudiera gustar él y él terminará teniendo más curiosidad por tener una relación con ella; y Juan a su vez jamás imagino que aunque yo no quisiera más una relación de pareja con Carmen me iba a ser dificil salir de los chantajes, las culpas y reclamos y por tanto de todos modos él lo padecería.
Yo a estas alturas podría echarle muchas culpas: que sí mientras trabajaba los problemas conmigo, perreaba a M, que si me engaño... Y él puede -y lo hace- decir que " a mí me importaba más Carmen que él" (mentira vil) o que nunca estaba para él... pero la realidad es que nuestros problemas se remiten al día en que yo le pedí que fueramos amigos, él se lo tomo a mal, yo quise que entendíera que lo que yo necesitaba era tiempo para poner en orden mi vida pero que lo amaba, él de esa frase sólo tomo la última parte, yo lo permití y los dos comenzamos a hablarnos con amor y ternura, hasta que entendimos que eramos "novios", comenzamos a tratarnos y a exigirnos como tal, nos jodimos y nunca nos dimos el tiempo de que cada uno estuviera claro y en paz: NO SUPIMOS SER AMIGOS, NI TENERNOS PACIENCIA, NI QUISIMOS ESPERARNOS MUTUAMENTE PARA NO DAÑARNOS Y NO DAÑAR AL OTRO...
Je... creo que acabo de descubrir por que me molesto que él le dijera a Carmen que "poco a poco él y yo nos habíamos convertido en amigos". Desde hace un tiempo había descubierto parte de esa molestia, de hecho fue esto lo que me llevo a escribir la entrada "Amiga", cuando la escribí: me molesto que dijera que eramos amigos cuando yo en realidad nunca me di cuenta como fue que "eso" pasó, me sentí descalificada, me sentí menos mujer, me sentí usada y me sentí engañada, pero más que nada me sentí no tomada en cuenta y atacada, como que él buscaba una venganza de justamente ese día en que yo le pedí que fueramos amigos: cuando leí aquella cosa vi como esa idea de él, cuando yo le pedi que fueramos amigos, de menosprecio, , esa idea, jamás se le quito. Fue un dolor que llevó rodando por todo el camino escondidito porque no quiso entender por que le ofendio y entonces en el momento propicio me ataco con ese dolor para que yo sintiera lo mismo que él había sentido. Sí, cuando leí eso fue como ver una bolota de nieve desde lo alto alto, que él había estado rodando lentamente hasta encontrar el momento para lanzarmela: como si "amigo" fuera realmente un insulto.
Pero, sabes ? Lo fue. Dicho desde el punto en que él lo hizo y el modo en que él lo hizo, fue un insulto. Y sabes? Creo que a estás fechas ni siquiera sabe porque quiso hacerme sentir así. Yo sé que fue venganza, en este momento me doy cuenta, pero yo no pretendía lastimarlo en aquél entonces como para que él quisiera ir acumulando su rencor. Yo quería tener paciencia de él, llevarnos las cosas con calma, entendernos, apoyarnos sin exigirnos y pedirselo más que menosprecio era una muestra de alta estima y de mucho amor, porque pensaba que poder tener esa calma sin exigirme tenía que demostrar que él era un hombre grande, capaz de posponer un poco su bienestar en pro del bienestar de a quien amaba. Yo lo creía tan grande, que creía que era capaz de ser mi amigo, era algo muy difícil siendo que él de mí requería mi atención, pero te imaginas? La idea que yo tenía de él era que estaba más allá del egoísmo: él era un hombre inmenso... Aunque al parecer él no creyo que yo lo viera así.
La razón por la que ahora puedo aegurarte que él lo hizo en venganza y como insulto es la gran diferencia de como sucedieron las cosas. Mientras yo le pedí "sé mi amigo","seamos amigos", teniendo en mente que si él lo aceptaba y lo era iba a convertirse en un hombre con mucho más valor,y le di la opción de elegir... él de la noche a la mañana me bajo del estado de "el amor de su vida" a "tan sólo una amiga": de la noche a la mañana!!! Mientras él aseguraba que había sido poco a poco, ¿cómo fue y no entere? ¿No tenía yo el suficiente valor para él para poder elegir ser o no ser su amiga? ¿Él no me pensaba una persona tan grande como para serlo, como para elegir ser su amiga si él me lo pedía porque lo necesitaba? La amistad se elige, amigo, no se endilga...
¿Y por qué te digo esto? (el que la amistad se elige no se endilga) porque tu amigo, tu verdadero amigo, siempre te va a decir que lo es porque esa es su intención para contigo... La amistad es resultado de un amigo más un amigo, es decir, ambas personas tienen que tener la intención hacia el otro de amistad: de otro modo lo que se tiene es otra cosa. Hay amigos que se dicen amigos pero tienen la intención de cogerte, tener una relación de pareja contigo o de tomar de ti lo que les sirva (dinero, posición, ideas, tu trabajo), cual sea la intención si no tienen la de amistad por mucho que se digan amigos para contigo, entre ustedes no existe una amistad, aún cuando tú si tengas la intención de amigo. Lamentablemente todos nos manejamos por nuestras verdaderas intenciones no por nuestros dichos: son las verdaderas intenciones las que siempre salen a relucir aunque nos empeñemos en decir algo contrario para taparlas.
Basado en esto yo te puedo decir que la intención de Juan para conmigo en ese tiempo que dijo que él y yo nos habíamos convertido poco a poco en amigos no era de amigos a pesar de su dicho. Su intención era encelarme para sentir que aún gozaba de mi amor, ¿y como puedo asegurarte esto? Porque seguía diciendome que M era menos que yo o que simplemente no le nacia con ella todo lo que le nacía conmigo, al tiempo que hablaba de como se la pasaba con ella. Eso a mí me causaba un corto circuito, y terminaba mimándolo pero sin poder dejar de lado que al parecer se divertía con ella. La intención de Juan también era sentirse amado por ambas partes... ¿por qué? Eso preguntasélo a él. Si me preguntas a mí solo podrás obtener una suposición: a la fecha no ha sabido reconocer su valor por si mismo tanto que requiere que otros se lo digan y entre más sean estos otros, mejor, porque él seguirá menospreciandose... Tristemente eso es lo que yo supongo.
Como sea, siguiendo en esto de la amistad, como te dije es una elección. Tengo la teoría de que se puede cambiar de intención si uno lo elige, así pues yo por ejemplo con Berenice he decidio ya ser su amiga, ya tengo hacia ella la intención de amistad: quiero estar para ella, apoyarla, aconsejarla, poder brindarle ayuda cuando lo necesite ya sea en mano de obra, dinero, hospedaje, compañia, etc; demostrarle que cuenta conmigo para esto por medio de mis mensajes, o las contestaciones a los suyos y así: Quiero ser su amiga. Ya no tengo la intención de más, no me imagino una vida de pareja con ella, y sexualmente tampoco: fue tanto el daño que me hizo quitar eso de mi mente que realmente al pensar en una vida de pareja y en el sexo con ella siento rechazo, rechazo justamente a más daño, pero afortunadamente me quedaron las ganas de estar para ella y he elegido ser su amiga, y ella también al parecer. Aunque realmente nuestra amistad es muy reciente (nuestra intención de amigas mutua), sabes? Muchos la ven todavía con suspicacia, pero no es para menos, mucha historia por detrás, pero igual, lo que cuenta son nuestras intenciones.
Distinto esto todavía a con Carmen. Yo ya le expresé mi intención de amistad hacia ella. Al principio del año hablabamos de "amigos con derechos" (sexuales) pero al menos a mí eso no me funciono, tanto es así que llevamos poco más de dos meses (creo) de no tener relaciones sexuales, y es que mi intención hacia ella sobre esto ya no existe. Me decía al principio que todo era porque ella no era lo suficientemente atractiva físicamente, pero lo es, el asunto es que cuando se lo admití y reconocí que partes de ella eran atractivas, nos volvimos a meter en el embrollo sexual, cosa que en mí se tuvo que aclarar: en el momento que acepte mi intención de amistad hacia ella, aunque puedo reconocer que es atractiva (y que cuando adelgace lo será más), en mi no despierta la intención sexual porque ya mi intención es otra y en esa otra no cabe el sexo. Ahora bien... Carmen ya va aceptando que mi intención hacia con ella es la de amistad, aún no la acepta del todo, pero ya la va aceptando... el problema es que ella sigue teniendo otra intención hacia mí. Por tanto entre ella y yo aún no existe amistad, existen intenciones diferentes. ¿Entiendes mejor?
Ahora bien para cuando yo le pedi a Juan que fuera mi amigo, pretendía que nuestro rol de amigos, nuestra amistad, se sumara tarde o temprano a nuestro amor. ¿Has oído decir a las parejas que ellos además de parejas son amigos? Suena muy bonito, no? ¿Tú lo crees posible? Yo creo que sí, aunque en la práctica amar y ser amigos... resulte casi hablar de lo mismo. Te explico.
Se dice que el amar es dar. Yo con el paso de los años me he dado cuenta que cuando se ama se busca el bienestar de la otra persona, se le impulsa, se le motiva, se le reconoce, se le dan caricias, se le dan consejos, se le cuida, y así... todo, pensando en su bienestar. Si te fijas la definición parece muy similar a la que te di de la amistad, pero esto es lo que la hace diferente: el amor espera reciprocidad, además, en el amor a la pareja (porque existe amor a otros) siempre se espera sexo, no? Bueno... la cosa es que en la espera de esa reciprocidad quien ama se vuelve egoísta... Terminamos dando pero siempre esperando. Lo hemos vuelto un simple intercambio mercantil. No se supone que tenga que ser asi. Se supone que amistad y amor debieran ser lo mismo con la salvedad de que la primera carezca de sexo, la cosa es que como ha terminado siendo de otra manera en estos tiempos el amor tiene que recurrir a la amistad para controlarse, o más bien para recordar que podemos dar sin esperar tanto a cambio, más bien, dando por la simple razón de que queremos bienestar para el otro.
Yo quería eso con Juan. Quería formar amistad que se sumará con el amor... Quería que nos dieramos cuenta que ayudando a que él otro estuviera bien nos ibamos a ayudar a nosotros mismos, pero no lo logramos por que no tuvimos paciencia. Y bien dicen que lo que de prisa se hace lento se llora... Tuvimos prisa en sentirnos novios, en cumplirnos como tales y no construimos un lugar en donde cada uno se sintiera a gusto y no traer a nuestra relación cosas que no venían al caso.
En fin... que es desde entonces que yo he querido este tiempo. Como te dije quisiera ahorrarme estas largas entradas y mis patéticas y vergonzosas confesiones, pero no quiero ahorrarme mis análisis, esos me hacen bien, así pues creo que todo lo otro son gajes del oficio. Como sea voy a tomarme este tiempo como venga, pero eso sí, quiero cumplir con esto de no tener pareja y eso incluye a las parejas sexuales: voy a tener un año de celibato!!! Je... seguro que esto a la larga puede traer buen tema de conversación, por lo menos en lo que se refiere a pornografía... por que... la masturbación no cabe como relación sexual, o sí? jajajajajajajajajajajajajajajajajajajaja (bueno, tampoco es que lo haga mucho últimamente)... pero sí... Espero que esto del año te haya quedado un poco más claro ahora sí. Las razones para él y el por que esta vez si me lo voy a tomar en serio, sí, sí.
Cambiando de tema... ¿que te ha parecido el cambio de diseño del blog? Creo que a mí me gusta más. Le he agregado una lista de reproducción de videos: son del canal de mi hermano!!! Y el primero es un cortometraje que hace años le ayude a producir. Si no lo has visto, velo!!!! Conforme vaya subiendo más videos ahi los agregaré, de cualquier modo el enlace a su canal también lo incluí en la barra lateral izquierda por lo que en cuanto él suba un video igual se mirará como actualización de esa barra. Sobre la barra lateral derecha también puedes ver las actualizaciones de mis otros blogs... El de Partirme en 2 no lo puse porque realmente no he escrito mucho ahí aunque realmente la idea vale la pena, como sea... ¿recuerdas que te hable de proyectos con mi hermano? Se trata de proyectos de video y él ya tiene 3 guiones hechos, 3 ideas de series de las cuales me ha pedido escriba historias, sus primeros videos en youtube y su blog con sus escritos, el cual ya te he incluido como enlace en la barra lateral izquierda y en los enlaces de La otra parte , el blog de mi hermano es Libestod. Date una vuelta y comentale!!!
Yo por mi parte ya tengo mi primer guión como tal y otro que como más bien es una idea de un baile no sé si entra como guión, pero ya está. Todo lo demás son ideas para la etiqueta Recuerdos y exorcismos de la Bitácora indiferente que poco a poco está perdiendo su descripción y en los últimos días la siento cada vez más mía, tal que lo más probable es que me tome este día más a parte de los otros dos días anteriores por los que no he actualizado este blog... y es que ayer... iba a subir unas fotos de feliz cumpleaños que finalmente no me senti con derecho de subir por qué... yo ya no estoy incluída en esa vida, sabes? y aunque le etiqueta de "recuerdos" es justamente para ir curandome de este tipo de cosas sobre esto ya te ahondaré después...
Como sea, lo de los videos va, y mi hermano me esta motivando para aprender más de fotografía y para crear mi propio vlog e ir produciendo mis propias ideas con su ayuda y subirlas a mi canal. Sobre el vlog pienso que tal vez sería del tema de Partirme en 2 y así mato dos pájaros de un tiro o tal vez sería un vlog sobre los temas que aquí hablo. Lo único es que si soy un poco vanidosa y para hacerlos primero quiero bajar de peso, y para ello, bueno, la próxima semana ya me apunto para ir a nadar!!!! Yujuuuu... pero sí, así la cosa, ¿cómo ves?
¿Que video te pongo hoy para descansarte de tanta palabrería ? Oh! sí! Ya sé!!! Este que desde que baje la canción por recomendación de Juan me ha animado los días :D Disfrutala!!!
Te mando un beso!!!! Hasta la próxima!!!
viernes, 15 de abril de 2011
Dos personas...
Sólo hay dos tipos de personas que reconocen al miedo cuando lo ven: quienes viven de él y quienes han logrado vencerlo...
Los demás... sólo lo tienen dentro.
Si eres de los terceros debes saber algo: los primeros jamás te dirán que está en ti y a los segundos no querrás escucharlos.
Los demás... sólo lo tienen dentro.
Si eres de los terceros debes saber algo: los primeros jamás te dirán que está en ti y a los segundos no querrás escucharlos.
miércoles, 13 de abril de 2011
Un desahogo más
Por ahora solo quiero desahogarme... Recuerdas aquella entrada donde te conte que habia ido con mis compañeros de la Universidad? (Fluyendo) Entre otras cosas, además de sentirme incómoda por no sentirme parte de ellos más incómoda me sentí cuando uno de ellos, uno que de hecho me caía muy bien cuando estabamos estudiando, me pregunto qué que contaba además de mis estados "emo"... ¿Pues que iba a contarle? La verdad es que por el momento mi vida primordialmente sólo es poner en orden mis sentimientos y pensamientos, y, mientras lo hago, desahogarme... ni modo. El problema es que esa pinche frasecita me sigue dando vueltas en mi cabeza: "tus estados emo". ¿Tú que me lees pensarás lo mismo? Supongo que sí, pero ni que hacerle. Esto de la resignación, el orden y la limpieza lleva tiempo, y yo ya me puse un límite, sí, de hecho.
¿Recuerdas que en la entrada "Ayer" te dije que me había hecho un propósito que comenzaba ese día? Bueno, pues fue el poner en orden justamente mis acciones pasadas, mis sentimientos, mis pensamientos, mis deseos y mis metas en el transcurso de un año. Esto no significa tan sólo escribir con cierta regularidad para tener presente ese orden sino también comenzar a resignarme con lo que no va a pasar con Juan y dejarlo atrás. Díficil cosa si te confieso que la verdad lo sigo esperando. ¿Que quieres? Me pregunto Berenice hace unos minutos, "no me digas que a Juan" término su frase... jejeje... me quede callada un segundo y al siguiente confese que en efecto, eso es lo que quiero. Y sí, sé que resulta extraño hablar de un "que" cuando se habla de una persona, pero Juan representaba en mí muchisimas cosas que aún no puedo soltar. Como sea, poco a poco te las iré diciendo y conforme lo haga espero comenzar a tener paz. Por lo pronto esto "del año" implica también no relacionarme con absolutamente nadie que quiera o pueda plantearse una relación conmigo: ahora lo que menos quiero es una relación de pareja.
Poner en orden mis acciones desgraciadamente no sólo implica poner en orden lo que tenía con Juan sino lo que significo Berenice y Carmen dentro de eso que tenía con él, que aunque yo lo tengo ya bien claro me parece que no podrá ser tan definitivo hasta que no lo tenga escrito... Por lo pronto, hoy sólo vengo a desahogarme, a fumarme un cigarro frente al monitor y escuchar esta canción... lamentandome todavía. No me siento cómoda lamentandome en facebook: por alguna extraña razón la tristeza no es bien vista en los ámbitos públicos y todo el mundo espera que todas tus pérdidas las olvides al día siguiente que han pasado. Yo la neta necesito más de un día y más de un mes o más de 3 o 4, pero no te preocupes, se irá la tristeza y formaré en mi a una Gabriela fuerte, decidida y clara, en paz consigo misma y con quienes le rodean: al menos esa es la idea.
Me pienso en un año. El próximo 8 de abril no será como que ya todo paso y a las 00:00 hrs de ese día ya pueda volver a estar con fulanito o fulanita planteandome tener hijos, casa y otro perro (otro más? jajajajajajajajajajaja), no. Quiero que este año mío sea de terapia. Sacando contigo todo mi malestar y mi vida: lo único que es segurísimo es que será mucho más barato que mis mentadas terapias con Eduardo. Yo lo que tengo es más un pinche desmadre en mi cabeza y corazón, porque mira que tener guardada la primera vez que tuve sexo con Carmen junto y bajo el término de "video llamadas con Juan" no es para nada tener orden, pero vamos, iré acomodando todo. Ya te contaré más de este año en mi próxima entrada, desde cuando lo he querido, que quería entonces de él, en que resulto y que jodio en su planteamiento, entre otras cosas. Por lo pronto te dejo con la canción que me ayuda hoy en el desahogo, me he terminado mi cigarro: ya me fume los dos de la semana, ando grave.
En fin. Canta conmigo, acompañame con una chela aunque sea media semana. Grita conmigo al pinche norte a más de 3 000 km y abrazame como cuatito de parranda. Anda, mira que lo necesito. Un beso
En la vida siempre suele suceder, que a los que queremos no nos quieren bien...
¿Recuerdas que en la entrada "Ayer" te dije que me había hecho un propósito que comenzaba ese día? Bueno, pues fue el poner en orden justamente mis acciones pasadas, mis sentimientos, mis pensamientos, mis deseos y mis metas en el transcurso de un año. Esto no significa tan sólo escribir con cierta regularidad para tener presente ese orden sino también comenzar a resignarme con lo que no va a pasar con Juan y dejarlo atrás. Díficil cosa si te confieso que la verdad lo sigo esperando. ¿Que quieres? Me pregunto Berenice hace unos minutos, "no me digas que a Juan" término su frase... jejeje... me quede callada un segundo y al siguiente confese que en efecto, eso es lo que quiero. Y sí, sé que resulta extraño hablar de un "que" cuando se habla de una persona, pero Juan representaba en mí muchisimas cosas que aún no puedo soltar. Como sea, poco a poco te las iré diciendo y conforme lo haga espero comenzar a tener paz. Por lo pronto esto "del año" implica también no relacionarme con absolutamente nadie que quiera o pueda plantearse una relación conmigo: ahora lo que menos quiero es una relación de pareja.
Poner en orden mis acciones desgraciadamente no sólo implica poner en orden lo que tenía con Juan sino lo que significo Berenice y Carmen dentro de eso que tenía con él, que aunque yo lo tengo ya bien claro me parece que no podrá ser tan definitivo hasta que no lo tenga escrito... Por lo pronto, hoy sólo vengo a desahogarme, a fumarme un cigarro frente al monitor y escuchar esta canción... lamentandome todavía. No me siento cómoda lamentandome en facebook: por alguna extraña razón la tristeza no es bien vista en los ámbitos públicos y todo el mundo espera que todas tus pérdidas las olvides al día siguiente que han pasado. Yo la neta necesito más de un día y más de un mes o más de 3 o 4, pero no te preocupes, se irá la tristeza y formaré en mi a una Gabriela fuerte, decidida y clara, en paz consigo misma y con quienes le rodean: al menos esa es la idea.
Me pienso en un año. El próximo 8 de abril no será como que ya todo paso y a las 00:00 hrs de ese día ya pueda volver a estar con fulanito o fulanita planteandome tener hijos, casa y otro perro (otro más? jajajajajajajajajajaja), no. Quiero que este año mío sea de terapia. Sacando contigo todo mi malestar y mi vida: lo único que es segurísimo es que será mucho más barato que mis mentadas terapias con Eduardo. Yo lo que tengo es más un pinche desmadre en mi cabeza y corazón, porque mira que tener guardada la primera vez que tuve sexo con Carmen junto y bajo el término de "video llamadas con Juan" no es para nada tener orden, pero vamos, iré acomodando todo. Ya te contaré más de este año en mi próxima entrada, desde cuando lo he querido, que quería entonces de él, en que resulto y que jodio en su planteamiento, entre otras cosas. Por lo pronto te dejo con la canción que me ayuda hoy en el desahogo, me he terminado mi cigarro: ya me fume los dos de la semana, ando grave.
En fin. Canta conmigo, acompañame con una chela aunque sea media semana. Grita conmigo al pinche norte a más de 3 000 km y abrazame como cuatito de parranda. Anda, mira que lo necesito. Un beso
En la vida siempre suele suceder, que a los que queremos no nos quieren bien...
lunes, 11 de abril de 2011
Un día de los dificiles
Hay días que es más dificil ser de una pieza: mis ojos quieren ir hacia un lado, mi sonrisa a otro, mis abrazos a otro y mis labios a ti. Luego te busco para "verte" de lejos y me encuentro con la mala noticia de que ya no estás...
viernes, 8 de abril de 2011
Ayer
Ayer se cumplieron 3 años de que Juan abordará un camión a la frontera y jamás lo volviera a ver. Sí, ok, eso de que jamás lo volví a ver es un decir: después de un tiempo, cuando tuvo el dinero suficiente para comprarse una lap top tuvimos la oportunidad de charlar por video llamada. Aún recuerdo esa primer video llamada: se había rapado por primera vez la cabeza, yo estaba en un café internet (...) y le pedí me dejará verlo, y de pronto ahí estaba. La camara parecía estar por encima de su cabeza, traía puestos unos audifonos con microfono, traia puesta una sudadera negra, sus lentes, y lucía mucho más flaco de lo que se había ido.
Cuando lo vi fue como si el cuerpo se me calentara de la alegría, me reí un poco de su cabeza rapada pero después sólo me reía de lo contenta que estaba. Hacía meses que no sabía de él, hacía mucho más que no veía su rostro, y cuando lo vi... me extrañaba un poco su no tener cabello pero aún me resultaba el hombre más guapo, así que copie la pantalla de la computadora y me mande aquella foto, que desde entonces... sólo he mirado un par de veces por cierta razón...
Aquél día, cuando me vi hablando con él creí por un instante que había elegido el camino correcto, pero dos minutos después la vida se encargo de mostrarme que le había vendido mi alma al diablo. La razón: estaba con Carmen.
Juan se fue en abril, y durante un mes más o menos tuve noticias de él frecuentes: me llamaba una o dos veces a la semana un par de horas, hasta que se le terminaba la tarjeta de prepago. Poco a poco las llamadas se fueron haciendo menos hasta que dejaron de existir y entonces me quede sola, o al menos así lo sentí.
Seguía con Berenice, es verdad, cuando Juan se fue yo guardaba una relación con los dos que ambos conocían de antemano. Quizás esa fue la razón por la que Juan no quería o no podía definir su relación conmigo. En aquél entonces estaba tan enamorada de ambos que necesitaba estar con los dos, pero cada uno me quería para sí mismo. Así que cuando Juan se fue Berenice creyó que lo había logrado, que yo estaba sólo para ella, pero las llamadas de Juan y mi ánimo por ellas le reventaron la nube y comenzamos a reclamarnos todo, todo lo que habíamos hecho dentro de nuestra relación bilateral, hasta que llegamos a la violencia.
Yo jamás acepte mis errores con Berenice, pensaba que yo todo lo había dado y ella me engaño sin más ni más, pero el único y más grave error que cometí, y que de hecho definiría mi relación con ella, fue que si bien la amaba y que si bien me encantaba su personalidad tan dulce había comenzado mi relación con ella en una urgencia de entregarle a alguien lo que no había podido darle a Juan y en una urgencia porque alguien me amara como él no podía hacerlo. De ese modo, aunque di cosas bellas y me esforcé por la relación todo se construyó sobre la base de que Berenice tenía que cumplirme todas las expectativas que había tenido con Juan... Berenice tenía que ser Juan al menos en mi corazón. Pero igual cuando Juan regreso a mi vida yo no podía aceptar eso, había hecho tantos planes con Berenice que quería cumplirlos, ya no sé si por deber, por culpa, por amor o por confusión, por eso cuando las llamadas de Juan cesaron me sentí un tanto aliviada e intente levantar mi relacipn con Berenice: pero no se puede levantar nada con malas bases, sabes? Como levantar una relación basada en el amor por alguien más?
Así que naturalmente mi relación con Berenice se fue desmoronando, aunque claro... yo tampoco podía aceptar eso. En mi cabeza sólo rondaba una idea: quiero que esto acabe, quiero que esto acabe, pensando en la situación de violencia y encierro que Berenice y yo ya estabamos viviendo... Era junio y Carmen me busco por primera vez através de un mensaje al celular.
Me sentí traicionada, ¿por qué Juan le había dado mi número? Pero ese era el modo clásico en que se hacían las cosas entre ellos. A partir de ese momento pensé que si Juan no me llamaba a mí seguro sí le estaba llamando a ella... y la odie más, pero claro, inmediatamente pensé en la posibilidad de saber sobre Juan a través de ella, lo único era que verdaderamente no estaba lista para verla. Un mes después... las cosas con Berenice se había agravado aún más: yo ya no salía, mi vida era casa, casa, y asomar la nariz únicamente cuando Berenice venía a comer y a saludarme. Me había convertido en una mujer gris y necesitaba regresarme el color así que cuando Carmen volvió a buscarme decidí hablar con ella sólo para salirme de la rutina, con la esperanza también de que ello representara un cambio en mí y por supuesto, de saber algo de Juan...
Salimos a tomar un café que ella invito porque... yo no tenía dinero. Quedamos en las inmediaciones del metro donde cada una había tomado su rumbo la última vez que nos vimos, esa última vez en que yo le aseguraba "tú y yo no somos ni fuimos nunca amigas, tú me usaste para estar bien con Juan, para tener información de él, para saber quien era yo y darle lo que según tú él quería, pero se acabo: tendrás que arreglartelas sola, porque de mi ya no vas a tener más maneras de conquistarlo. Él es un hombre único y si no te has dado cuenta después de tantos años de relación con él, de aquello que él quiere estás frita". En aquél entonces Carmen se quedo callada... y yo también: jamás supe si mi aseveración era cierta, si mi suposición de que me había estado utilizando para conocerlo e imitarme era verdad, pero ella se quedo sin palabras y minutos después yo me acabe el café y decidí pagar. Ella quiso pagar como en otras salidas lo había hecho pero me negué diciendo que para un café sí tenía dinero extendiendo el billete y demarcando entonces el fin de nuestro trato al que ella llamaba amistad. Con todo esto en la mesa... podrás comprender como aquella nueva salida de "reencuentro" tenía tintes epifanicos que ignore, que ignore porque era más mi necesidad de salirme de la rutina y más mi necesidad de tener noticias de Juan.
Con su número de celular guardado, me comunique con ella a la hora que acordada para decirle "llegué". Me dijo que estaba cerca, que venía dando la vuelta sobre la avenida que la esperara en la esquina y que su coche era blanco... ¿? ¿coche? Lo había olvidado. Cuando el padre de Juan le dio la noticia de que tenia que irse y que ya todo estaba pagado, Juan quiso quedarse por nosotros: hacía tan poco que nos habíamos vuelto a reunir, llevabamos tan poco tiempo juntos y eramos tan felices a pesar de la situación en que yo nos había metido... que él quería quedarse por mí y para mí... pero tenía que pagarle entonces a su padre lo que él había pagado para arreglar todo para su viaje... y no tenía trabajo. Hablamos de esto varias veces... yo tenía tantos conflictos al respecto: deseaba que se quedara pero igual no tenía dinero para pagarle a su padre... por otro lado si se lo pedía... si le pedía que se quedará ¿a que lo condenaba? A esa vida pinche de salarios minimos y horarios extra donde su talento de escritor y creativo no era valorado, a esa vida pinche donde ni siquiera él reconocía su valor. No, no podía ni debía pedirselo. Pero... según conto Juan en aquellas pláticas en que valorabamos el asunto, Carmen al ver la situación y su deseo de quedarse ofreció vender su carro para pagar la deuda con el padre de Juan y lograr que se quedará.
Cuando yo escuche aquello... deconfié: no podía creer en la buena voluntad de Carmen y menos sin ningún interés de por medio: sospechaba que Juan seguía teníando sexo con ella pero como no tenía ni cara ni fundamentos para reclamar jamás lo quise hacer evidente, pese a eso no podía dejar que Carmen se quedara con el honor de haber ayudado a Juan, o de habernos ayudado a quedarnos juntos, porque además, lo sabía, igualmente ella no se iba a quedar con las manos vacías: el pago de ese deuda le aseguraba agradecimiento agachado de Juan... y para como era Juan en aquél entonces, estaba asegura que Carmen obtendría ese agradecimiento contaminado de culpa. No. Definitivamente esa opción estaba cancelada. Aunque creo que el mismo Juan ya la había cancelado para el momento en que me lo conto, lo que me hacía ver que de todos modos ya había crecido.
Con este antecendente, ¿cómo crees tú que me sentiría al conocer ese carro? Fueron tantas cosas... Por un lado me sentí pequeña: Carmen tenía posición y posesión, dinero, trabajo, solvencia... yo nada más me tenía a mi misma. Subí al auto y no pude evitar estudiarlo a fondo, ¿así que este era el carro que podía haberme dado la felicidad? Era blanco y pequeño, pulcro por dentro, con sus fundas dolor domino, su estereo con mp3 y bluetooth con el que Carmen contestaba las llamadas de su celular y dejaba que todo el auto escuchara sus conversaciones. Y ella... manejaba muy bien... o bueno, al menos así me lo parecía siendo que yo no sabía manejar, pues de hecho le tengo terror al manejo porque hay que lidiar con los trailers: frente a Carmen yo era pequeña.
Aún con todo... llego el instante en que me sentí con una igual porque si bien no había tenido noticias de Juan últimamente, su ausencia la justificaba en el trabajo y la falta de dinero, y creía que su amor por mí seguía intacto, así pues yo poseía algo que Carmen no poseía: el amor de Juan, lo cual, de algún extraño modo, nos ponía al mismo nivel de grandeza. Sí...
Cuando lo vi fue como si el cuerpo se me calentara de la alegría, me reí un poco de su cabeza rapada pero después sólo me reía de lo contenta que estaba. Hacía meses que no sabía de él, hacía mucho más que no veía su rostro, y cuando lo vi... me extrañaba un poco su no tener cabello pero aún me resultaba el hombre más guapo, así que copie la pantalla de la computadora y me mande aquella foto, que desde entonces... sólo he mirado un par de veces por cierta razón...
Aquél día, cuando me vi hablando con él creí por un instante que había elegido el camino correcto, pero dos minutos después la vida se encargo de mostrarme que le había vendido mi alma al diablo. La razón: estaba con Carmen.
Juan se fue en abril, y durante un mes más o menos tuve noticias de él frecuentes: me llamaba una o dos veces a la semana un par de horas, hasta que se le terminaba la tarjeta de prepago. Poco a poco las llamadas se fueron haciendo menos hasta que dejaron de existir y entonces me quede sola, o al menos así lo sentí.
Seguía con Berenice, es verdad, cuando Juan se fue yo guardaba una relación con los dos que ambos conocían de antemano. Quizás esa fue la razón por la que Juan no quería o no podía definir su relación conmigo. En aquél entonces estaba tan enamorada de ambos que necesitaba estar con los dos, pero cada uno me quería para sí mismo. Así que cuando Juan se fue Berenice creyó que lo había logrado, que yo estaba sólo para ella, pero las llamadas de Juan y mi ánimo por ellas le reventaron la nube y comenzamos a reclamarnos todo, todo lo que habíamos hecho dentro de nuestra relación bilateral, hasta que llegamos a la violencia.
Yo jamás acepte mis errores con Berenice, pensaba que yo todo lo había dado y ella me engaño sin más ni más, pero el único y más grave error que cometí, y que de hecho definiría mi relación con ella, fue que si bien la amaba y que si bien me encantaba su personalidad tan dulce había comenzado mi relación con ella en una urgencia de entregarle a alguien lo que no había podido darle a Juan y en una urgencia porque alguien me amara como él no podía hacerlo. De ese modo, aunque di cosas bellas y me esforcé por la relación todo se construyó sobre la base de que Berenice tenía que cumplirme todas las expectativas que había tenido con Juan... Berenice tenía que ser Juan al menos en mi corazón. Pero igual cuando Juan regreso a mi vida yo no podía aceptar eso, había hecho tantos planes con Berenice que quería cumplirlos, ya no sé si por deber, por culpa, por amor o por confusión, por eso cuando las llamadas de Juan cesaron me sentí un tanto aliviada e intente levantar mi relacipn con Berenice: pero no se puede levantar nada con malas bases, sabes? Como levantar una relación basada en el amor por alguien más?
Así que naturalmente mi relación con Berenice se fue desmoronando, aunque claro... yo tampoco podía aceptar eso. En mi cabeza sólo rondaba una idea: quiero que esto acabe, quiero que esto acabe, pensando en la situación de violencia y encierro que Berenice y yo ya estabamos viviendo... Era junio y Carmen me busco por primera vez através de un mensaje al celular.
Me sentí traicionada, ¿por qué Juan le había dado mi número? Pero ese era el modo clásico en que se hacían las cosas entre ellos. A partir de ese momento pensé que si Juan no me llamaba a mí seguro sí le estaba llamando a ella... y la odie más, pero claro, inmediatamente pensé en la posibilidad de saber sobre Juan a través de ella, lo único era que verdaderamente no estaba lista para verla. Un mes después... las cosas con Berenice se había agravado aún más: yo ya no salía, mi vida era casa, casa, y asomar la nariz únicamente cuando Berenice venía a comer y a saludarme. Me había convertido en una mujer gris y necesitaba regresarme el color así que cuando Carmen volvió a buscarme decidí hablar con ella sólo para salirme de la rutina, con la esperanza también de que ello representara un cambio en mí y por supuesto, de saber algo de Juan...
Salimos a tomar un café que ella invito porque... yo no tenía dinero. Quedamos en las inmediaciones del metro donde cada una había tomado su rumbo la última vez que nos vimos, esa última vez en que yo le aseguraba "tú y yo no somos ni fuimos nunca amigas, tú me usaste para estar bien con Juan, para tener información de él, para saber quien era yo y darle lo que según tú él quería, pero se acabo: tendrás que arreglartelas sola, porque de mi ya no vas a tener más maneras de conquistarlo. Él es un hombre único y si no te has dado cuenta después de tantos años de relación con él, de aquello que él quiere estás frita". En aquél entonces Carmen se quedo callada... y yo también: jamás supe si mi aseveración era cierta, si mi suposición de que me había estado utilizando para conocerlo e imitarme era verdad, pero ella se quedo sin palabras y minutos después yo me acabe el café y decidí pagar. Ella quiso pagar como en otras salidas lo había hecho pero me negué diciendo que para un café sí tenía dinero extendiendo el billete y demarcando entonces el fin de nuestro trato al que ella llamaba amistad. Con todo esto en la mesa... podrás comprender como aquella nueva salida de "reencuentro" tenía tintes epifanicos que ignore, que ignore porque era más mi necesidad de salirme de la rutina y más mi necesidad de tener noticias de Juan.
Con su número de celular guardado, me comunique con ella a la hora que acordada para decirle "llegué". Me dijo que estaba cerca, que venía dando la vuelta sobre la avenida que la esperara en la esquina y que su coche era blanco... ¿? ¿coche? Lo había olvidado. Cuando el padre de Juan le dio la noticia de que tenia que irse y que ya todo estaba pagado, Juan quiso quedarse por nosotros: hacía tan poco que nos habíamos vuelto a reunir, llevabamos tan poco tiempo juntos y eramos tan felices a pesar de la situación en que yo nos había metido... que él quería quedarse por mí y para mí... pero tenía que pagarle entonces a su padre lo que él había pagado para arreglar todo para su viaje... y no tenía trabajo. Hablamos de esto varias veces... yo tenía tantos conflictos al respecto: deseaba que se quedara pero igual no tenía dinero para pagarle a su padre... por otro lado si se lo pedía... si le pedía que se quedará ¿a que lo condenaba? A esa vida pinche de salarios minimos y horarios extra donde su talento de escritor y creativo no era valorado, a esa vida pinche donde ni siquiera él reconocía su valor. No, no podía ni debía pedirselo. Pero... según conto Juan en aquellas pláticas en que valorabamos el asunto, Carmen al ver la situación y su deseo de quedarse ofreció vender su carro para pagar la deuda con el padre de Juan y lograr que se quedará.
Cuando yo escuche aquello... deconfié: no podía creer en la buena voluntad de Carmen y menos sin ningún interés de por medio: sospechaba que Juan seguía teníando sexo con ella pero como no tenía ni cara ni fundamentos para reclamar jamás lo quise hacer evidente, pese a eso no podía dejar que Carmen se quedara con el honor de haber ayudado a Juan, o de habernos ayudado a quedarnos juntos, porque además, lo sabía, igualmente ella no se iba a quedar con las manos vacías: el pago de ese deuda le aseguraba agradecimiento agachado de Juan... y para como era Juan en aquél entonces, estaba asegura que Carmen obtendría ese agradecimiento contaminado de culpa. No. Definitivamente esa opción estaba cancelada. Aunque creo que el mismo Juan ya la había cancelado para el momento en que me lo conto, lo que me hacía ver que de todos modos ya había crecido.
Con este antecendente, ¿cómo crees tú que me sentiría al conocer ese carro? Fueron tantas cosas... Por un lado me sentí pequeña: Carmen tenía posición y posesión, dinero, trabajo, solvencia... yo nada más me tenía a mi misma. Subí al auto y no pude evitar estudiarlo a fondo, ¿así que este era el carro que podía haberme dado la felicidad? Era blanco y pequeño, pulcro por dentro, con sus fundas dolor domino, su estereo con mp3 y bluetooth con el que Carmen contestaba las llamadas de su celular y dejaba que todo el auto escuchara sus conversaciones. Y ella... manejaba muy bien... o bueno, al menos así me lo parecía siendo que yo no sabía manejar, pues de hecho le tengo terror al manejo porque hay que lidiar con los trailers: frente a Carmen yo era pequeña.
Aún con todo... llego el instante en que me sentí con una igual porque si bien no había tenido noticias de Juan últimamente, su ausencia la justificaba en el trabajo y la falta de dinero, y creía que su amor por mí seguía intacto, así pues yo poseía algo que Carmen no poseía: el amor de Juan, lo cual, de algún extraño modo, nos ponía al mismo nivel de grandeza. Sí...
Entonces pues al subir al auto, después de un rato me sentí comoda y poco a poco fui haciendo bromas al respecto para cortar con esa tensión que sentía: "uy, un coche, seguro me vas a secuestrar y aventar por ahí" "nomás no choques con el microbusero y emprendas la graciosa huida dejandome inconsiente" jejeje... y así.
Carmen pensó donde ir para tener buena plática y algo rico que comer y resolvio conducir a una cafetería cerca de calzada de Guadalupe, que de hecho es buena en calidad y ambiente, sip. Al principio estaba a la defensiva, pero realmente quería cambiar algo en mi entorno y poco a poco la conversación se fue dando. De ese modo hicimos un recuento de nuestras situaciones, de nuestro pasado, y lamentamos que Juan hubiese conducido las cosas como las había conducido. Luego, me hablo de Juan, de lo que sabía de él al momento y por un lado me sentí desolada y por el otro feliz: estaba teniendo noticias de él tal y como había querido pero no las estaba teniendo ni de su boca ni de sus manos lo cual era triste puesto que denotaba indiferencia hacia mí... pero entonces Carmen me ganó disculpandose conmigo y diciendome que Juan había hablado con ella muchas veces y que en todas hablaba de mí como la mujer por la que él regresaría, por tanto esta platica era para mostrarme su respeto hacia mi relación con él.
Igual de todos modos Carmen no cambiaría... y yo tampoco. A la fecha sigo analizando quien es ella y que quiere para lograr entender como fue que cambio tan rápido. ¿qué quería? ¿venganza? ¿realmente se enamoro de mí? ¿tanto Juan como yo fuimos un capricho? ¿por qué yo o por qué él? Asimismo porque fue que nosotros la metimos enmedio cada quien en un tiempo distinto...
En fin... estaba obteniendo lo que quería: noticias de Juan, pero igual el resto de mi vida no la podía dejar de lado: mi relación con Berenice seguía ahí, dañada cada vez más. En aquella plática Carmen y yo llegamos justo a tocar ese punto en el que pasados los años una frase resalta entre todas las demás, la aceptación de una idea que Pablo me había dado meses antes: "pues podrás estar con muchas mujeres, muchacha, pero finalmete tendrás que darte cuenta que tu cuerpo esta hecho para estar con un chico"... Pablo me había dicho aquello cuando le exprese mi confusión entre Berenice y Juan, y en el contexto en que me lo dijo, me decía que finalmente yo debía estar con Juan, aunque claro, fuera de contexto... la frase resulta un tanto homofobica para quien quiera verlo así (no yo, aclaro). Cuando le platique aquello a Carmen ella exclamo "vaya hasta que ese wey dice algo inteligente", continuando con el dicho de que algún´día yo repararía mi situación y podría estar en bien con Juan... Comprenderás la razón por la que aquella conversación resalta después de tantos años: el fin de semana siguiente la propia Carmen me ayudaba a echar por tierra aquello.
La noche del café Berenice vino a buscarme a casa y se encontro con la extraña cosa de que yo no estaba. Me llamo al celular y al decirle donde estaba insinuo que yo había salido con Carmen en cita amorosa... discutimos y terminamos colgando. Para mí aquello era algo sin fundamento, y según lo que decía Carmen para ella lo era también. Total, que de cualquier modo nos despedimos aquella noche en muy buena onda, le indique como salir para ir hacia su casa y me fui a dormir.
Al día siguiente recibía un mensaje de Carmen invitandome a irnos de fin de semana por sus vacaciones. Resultaba que de hecho ya tenía planes, iría con Cesar a Queretaro según recuerdo, pero querían hacerlo en el auto, primer strike: Carmen choco con su auto la noche del café enchuecando el eje, no supo entender mis indicaciones para salir y termino yendo al lado contrario y en lugar de llamarme y preguntar dio vueltas y vueltas hasta salir a Tlalnepantla donde se espanto y entre eso y la noche pego con una desviación, ella estaba bien, pero el auto debía ir al mécanico. Cesar quería ir manejando, por tanto los planes con él se cancelaron según me contó ella, así pues la segunda opción era salir a pueblear y me vio como buena candidata de acompañante, y de hecho lo era: me urgía hacer un cambio de vida...
Ya estaba conociendo a Carmen: le gustaba tener dinero, dominio y nunca preguntaba indicaciones así se perdiera, y yo quería conocerla, me parecía que era una buena manera de hacer un cambio en mí: permitirme conocer a aquella que en antaño me había hecho tanto daño... Y me fui con ella de fin de semana.
Lo único es que no contaba con que mi herida por Juan era grande: por mucho que yo creyera que era yo la única en su corazón la comunicación que mantenía con Carmen me demostraba que yo seguía en segundo lugar, y conforme fue pasando el fin de semana me vi en terreno ajeno tratandose de Juan: Carmen hablaba de él tanto, de sus gustos, de lo que él decía, de lo que habían vivido... y la propia Carmen guardaba en sí ademanes de él por tanta convivencia que me vi envuelta en un rollo de tristeza y seducción por lo desconocido de Juan, que cada vez quise saber más y más sobre quien era Juan en ojos, boca, y persona de Carmen. Cree entonces la idea de que esa era la manera en que yo podría conocer a Juan verdaderamente: através de ella y me decidí por mantenerme en contacto con ella lo más posible para saber todo sobre él.
Pero no contaba con lo que la propia Carmen estaba viviendo en sí misma. No te voy a engañar, hubo un momento en que sentí que aquél viaje no lo estaba haciendo con una posible amiga sino que con una pretendienta, tanto que me senti nerviosa y preferí ropa cubierta para alejar la idea del coqueteo de mí: asimismo me percate de como Carmen me coqueteaba pero igual creí que me lo estaba imaginando: no era posible, me entiendes? ELLA ERA HETEROSEXUAL.
Pero igual supo armarmela... Al parecer ella no se ha dado cuenta de ese poder que tiene de manipular las cosas a modo que la gente se va con ella todo porque ha sabido pegarle en una parte de las más sensibles y dolorosas, tal que en el dolor y confusión de las personas, solemos hacer lo que ella quiere o indica... y bueno, caí... De pronto la última noche antes de contarme como se estaba sintiendo hacia mí, me dijo que tenía algo que decirme que tal vez me dolería mucho... y entonces me contó que Juan había venido en junio, que la había buscado, y habían pasado juntos todos los días en que él estuvo en México... No supe que decir. Estabamos acostadas en la misma cama: tenía tan poco espacio para fingir que aquello no me había importado, pero al fin logré articular que yo lo sabía, o al menos me lo sospechaba y en mi interior me cree una mentira: "que bueno que no me busco porque si lo hubiese hecho la despedida hubiera sido más dificil, yo ya no hubiera querido que se fuera...", le dije... todo era verdad, salvo lo de que era bueno que no me hubiera buscado: habria preferido que me desgarrara el corazón con otra despedida que volviendome a poner en el lugar de la chica a la que puede dejar de ver.
Hablamos de otras cosas después de eso, y de pronto, se le ocurrió marcarle a Juan: por si fuera poco tenía su número... Yo no. Juan contesto y se sorprendio de escucharnos juntas, hicimos bromas, me aguante el llanto y el dolor y fingí, fingí, fingi pero igual no quise hablar con él. Finalmente colgaron, me quede viendo la tele y haciendome wey. Había un documental de prostitución en E.U... y sonreí... Juan me había platicado que en E.U. por la prohibición de la prostitución solían hacer redadas disfrazando a chicas policias ofreciendo servicios sexuales y pobre de ti si los aceptabas porque entonces al tambo. El docuimental justo hablaba de aquello... y por un instante me senti cerca de él de todos modos, pero era mentira: todas las cosas indicaban lo contrario.
Como fuera Carmen hizo entonces su insinuación más fuerte ofreciendome un masaje, prácticamente ordenandomelo de hecho. Me hizo voltearme, levantarme la blusa y como aquello me desconcerto, lo hice. No, no me creas que me estoy victimizando : la realidad es que cualquier cosa que Carmen haya querido y podido ocasionar yo la permiti. El punto fue que segui pensando bien de Carmen y como ella era la que que hecho estaba padeciendo de una contractura en la espalda supuse que aquello del masaje para mí era un modo de pedirme que yo la masejeara. Sí, obvio, en los ámbitos sexo-sentimentales aquello no era nada inocente, pero yo quise pensar que lo era porque de hecho no queria meterme en más problemas, aunque lo hice.
Después de haberle dado el masaje que en mí realmente tenía fines terapeuticos, pasado un rato, apagamos la televisión y luego de eso me confeso que "yo era la primera mujer que había logrado cambiarle el cassette en muy pocos días". ¿En que aspecto? pregunté ¿cómo persona? ¿cómo amiga? ¿cómo mujer? Todo el fin de semana le había hablado de como era ser yo, esta bisexual complicada y muy confundida en aquél entonces... y yo... a razón de su certificación al comentario de Pablo la creía un tanto homofoba... por lo que pensaba que si yo le había "cambiado el cassette" era porque esa homofobia se había ido. Aunque también es cierto que me temía lo que me iba a decir y hacer: "en todo" dijo, pasando su mano por mi cintura.
Aquél momento... ella lo recuerda con tanta emoción y alegría... yo la verdad lo recuerdo con molestia, tristeza y frustración. Sólo podía pensar en Juan y Berenice, en cuanto Juan me estaba mintiendo y en cuanto quería vengarme de Berenice. Así pues, corresponderle me parecía una salida fácil, una salida fácil para salir de esos circulos en los que ellos me habían metido... (o más bien, en los que me había metido con ellos) y lo pensé, callada, callada. ¿Te moleste? Me pregunto. No (no! con quienes estaba molesta era con ellos, con ellos!) Si no quieres no te estoy obligando, eh, me dijo. (Ja...) No, no es eso, es todo lo que traigo, todo lo que ya te hable, si lo hago no hay vuelta atrás. Respondí. Y ella dijo: es cierto...
Lo mejor hubiera sido que de ahí yo ya no hubiera seguido adelante, pero me preguntaba tantas cosas. ¿Cómo se sentiría estar con otra mujer que no fuera Berenice? ¿Cómo se sentiría hacerle lo mismo que Berenice me hizo a mí? ¿Cómo sería tocar el cuerpo con el que Juan había estado en lugar de estar conmigo? ¿Que le veía? ¿Qué tenía ella que no tuviera yo? ¿Por qué ella y no yo? ¿Porque regreso y la busco a ella y no a mí? Así que con enojo, tristeza, sed de venganza, confusión, dolor, y preguntas y preguntas la besé, la desvestí, me desvestí y tuve con sexo con ella.
Mientras lo hacía casi todo el tiempo mantuve los ojos cerrados y busque no cruzar la mirada con ella. Mientras lo hacía pensaba que distinto era a como solia serlo con Berenice. Mientras lo hacía pensaba que Juan habia tocado esa piel y era al mismo tiempo una competencia con él y una búsqueda de él que duró hasta que termino... Le había vendido mi alma al diablo: me presento el contrato y yo lo firme.
A la mañana siguiente Carmen se veía feliz, nos bañamos juntas pero para mí fue rarisimo, acostumbrada a buscar los lunares de Juan entre el agua y nuestras risas, bañarme con Carmen casi en silencio y de un modo tan impersonal... me hacía darme cuenta cuando el sexo se llama sexo y cuando se le llama hacer el amor... Yo no había hecho el amor.
Salimos del hotel, desayunamos, platicamos... yo no tenía muchas ganas de hablar del asunto. Más bien tenía ganas de que ella se diera cuenta que todo había sido meramente sexual y que se hiciera cargo de ella misma, y bajo eso conduje toda mi conversación. Regresamos hasta la tarde del lunes, regresamos aunque ella quería quedarse otro día. Poco después de haber salido de la terminal Berenice me llamaba preguntandome si había tenido sexo con ella lo que obviamente no pude negar: mi relación con Berenice se iba al caño...
Carmen me acompaño hasta mi casa y aún fuimos a tomar un café. Tras la llamada y reacción de Berenice pensé que aquello era lo mejor... pero a Juan seguía sin querer perderlo... mi enojo se había ido, después de mis acciones cómo no? Aquella noche de venganza iba a joder mucho pero rogaba porque él me perdonara... Pasaron muchas más cosas en mí antes de que yo decidiera tener una relación propiamente dicha con Carmen, pero lo único con lo que te quedarás por hoy es que Carmen supo darme buenos intercambios de información a cambio de mi cariño. Era curioso, y quiero pensar que nunca supo lo que hacía, pero toda vez que saliamos, antes de abrazarme o hablarme de amor me hablaba de Juan, de como era de niño -más bien adolescente-, de como lo conocío, de como se comportaba... y yo era feliz con esos datos... tan feliz que lo agradecia con un beso que ella poco a poco transformo en una relación y yo lo permití con tal de seguir sabiendo de él.
Me parece que aún no lo entenderías... pero no importa, finalmente este es sólo un fragmento de como ha sido la cosa con Carmen. Tal vez no lo entenderás hasta que no te platique todo pedazo a pedazo, pero eso sí, te tengo que confesar algo más... creo que, ante todo, lo que siento por Carmen es miedo...
El último reclamo que Juan me hizo fue "¿y tú que me desmostrabas? ¿Que te importaba más Carmen?" Ja... no supe como rebatirselo pero sabes? aquello que él interpreto como más importancia en realidad era miedo, es miedo. Miedo de los gritos de Carmen, de sus chantages, de sus reproches... A pesar de que decidi tener relación con Carmen para conocer más a Juan y por tanto estar más cerca de él, al momento de realmente estar al lado de Juan, ya fuera por llamada, chat o video llamada temía que ella descubriera mi felicidad y me agrediera y entonces, por mi propio bienestar, buscando evitar sus maltratos, le decía o pedía a Juan dejar las cosas para otro momento... ¿de donde salio ese comportamiento mío? Aún no lo sé... ¿quien era o es Carmen para determinar lo que yo haga con mi tiempo y mis ganas? ¿que representa dentro mío? No lo sé. Lo único que sé es que eso fue lo que me costo el desamor de Juan... y por más que me duela tengo que enfrentarlo y hacerme responsable de ello para repararlo y jamás volver a permitir que me vuelva a suceder por mi bien.
Duele, sabes? Pero como ya dije en algún otro lugar prefiero comenzar a hacerme responsable de los resultados en mi vida y comenzar a dejar de sentir que Juan tiene toda la culpa... Por cierto... tengo algo que enseñarte :) , dale un vistazo a este sitio: Bitácora de las cosas que no te importan . He decidido dejar de esconderlo. Je... Ya luego te platicaré de las razones por las que lo cree, aunque creo que la descripción dice mucho de ello, también te platicaré de un proposito que me he hecho, un proposito que comenzó de hecho el día de hoy.
Me despido por ahora. No sabes cuan dificil me ha sido hablarte de esto... y eso que aún no te hable de todo, pero ya lo haré, ya lo haré. Te quiero! Te mando un besote. Gracias por escucharme. Te dejo con una canción que por ahora me reconfortará un poquitín.
Por cierto, checa tambien el blog de La otra parte, realmente no le he metido muchas cosas buenas, pero estoy segura que hace un rato que no lo has visto. Ahora sí. Cuidate. Te quiero mucho!!!
jueves, 7 de abril de 2011
Salvaje opinión
Desde mi pequeña y parcial perspectiva... desde mi pequeño mundo, desde mi guerra interna... doy una salvaje opinión por la paz:
El truco está en ver en los ojos de otros aquello o aquella persona a quien amas o amaste más, entonces detenerte si querías violentarlo: porque ese amor que sentías -o sientes- por otro puede seguir viviendo através de este otro acto de amor...
Sobre estos tres videos... me interesaba ponerlos ya que ayer, mientras la marcha por la paz aún estaba teniendo lugar las noticias daban la nota del discurso de Michel Leonhart en el que la administradora de la DEA aseguraba que la violencia que se está viviendo es señal de que las políticas de Felipe Calderón están funcionando, y en inglés subtitulado aplaudía las acciones que finalmente llevarían a ganar tanto a México como a Estados Unidos. Estaba buscando justamente el video que yo ví, transmitido por Foro TV alrededor de las 7 de la tarde, pero desafortunadamente no lo hallé, encontre en su lugar estos que de algún modo demuestran la indiferencia a la marcha que ayer se llevo a cabo.
El truco está en ver en los ojos de otros aquello o aquella persona a quien amas o amaste más, entonces detenerte si querías violentarlo: porque ese amor que sentías -o sientes- por otro puede seguir viviendo através de este otro acto de amor...
(Foto de Marc Riboud, Protesta en el Péntagono contra la guerra de Vietnam, en 1967, Flor en el fusil -Jan Rose de 17 años. Fotografía tomada del blog El ventano)
Videos del canal Ya basta no más sangre
Sobre estos tres videos... me interesaba ponerlos ya que ayer, mientras la marcha por la paz aún estaba teniendo lugar las noticias daban la nota del discurso de Michel Leonhart en el que la administradora de la DEA aseguraba que la violencia que se está viviendo es señal de que las políticas de Felipe Calderón están funcionando, y en inglés subtitulado aplaudía las acciones que finalmente llevarían a ganar tanto a México como a Estados Unidos. Estaba buscando justamente el video que yo ví, transmitido por Foro TV alrededor de las 7 de la tarde, pero desafortunadamente no lo hallé, encontre en su lugar estos que de algún modo demuestran la indiferencia a la marcha que ayer se llevo a cabo.
y perdón por ponerte una canción y foto gringa para hacer mención de un conflicto mexicano, pero ambas siempre me han resultado conmovedoras, además de que me resulta pertinente al observar que después de todo estamos pasando por esto no sólo por politica mexicana sino por política gringa. Simpatico que hasta los candidatos gringos se tomen esto a provecho
lunes, 4 de abril de 2011
Tocar con el viento
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