miércoles, 18 de mayo de 2011

Un poco de lo sucedido

Primera semana de ejercicio superada... pero auch! Me duele todo el cuerpo y además ya estamos en la segunda. Por cierto entre a 4 clases más además de la natación: aerobics, pilates, zumba y aqua aerobics. No preocupando, no me estoy excediendo (digo yo) las clases las imparte la misma maestra en el mismo horario todos los dias, es decir un día da pilates, el otro da zumba y así. Lo más agradable de este asunto es que todos los días entro a la alberca pues el día que no me toca aqua aerobics me meto a nadar solita a modo que todos los días estoy haciendo dos horas de ejercicio más la caminata de mi casa al metro, aja, aja.


¿Ahora entiendes por qué me duele mi cuerpo? Lo más curioso del asunto es que al terminar la primera clase me tiemblan las piernas y cuando entro al agua todos los dolores se me van: me encanta el agua y se me hace tan rica, y el estar dentro parece que todos los movimientos son tan sencillos... oh, sí. Lo malo es que hay que salir y al llegar a casa los musculos me recuerdan que por muy indoloro que me hayan resultado mis vueltecitas a la alberca y mis bailecitos en los aqua aerobics la verdad es que trabaje bastante, pero sabes? Me inspira que no soy la única que se avienta esta faena de tomar las clases como lo estoy haciendo: la mayoria de mis compañeras son señoras de más de 50 y ¡son mejores que yo! Me cae que yo quiero ser así cuando sea grande. Además recuerdo a mi mamá, cuando eramos niños esas dos mismas horas y la caminadita era lo que se aventaba: hacia una hora de gradas y una de aerobics y a veces  hasta se quedaba a jugar basquetball, ¿qué tal? A poco no era la neta del planeta? Y mira que mi mami siempre ha hecho ejercicio, pero no sé porque desde que yo deje de hacerlo hace tres años ella también... creo que fue esto del dinero :S sí, pero a ver, como le he platicado mis jaleos en el deportivo ya se está animando y ya nuestra cosa monetaria mejoro un poco, a ver que pasa.


Por lo pronto independientemente de eso hay algo que me preocupa: mi tiempo para escribir (más allá que el de trabajar), es que... esto es lo que sucede: Cuando comienzo a hacer ejercicio estoy tan cargada de endorfinas que no se me da el venir a platicarte nada, y mira, en otros tiempos esto era relativamente bueno porque entonces me alejaba de mis problemas y disque los olvidaba. Ahora esto no es una ventaja por la simple y llana razón de que me propuse sacar todos mis desmadres, mis malas decisiones, mis malos pensamientos, ponerl@s aquí, observar lo que me paso y "recuperar mis verdaderas intenciones" como dice Eduardo, así como poner orden en mi vida. Se supone que si yo ya tengo más o menos claro lo que me paso debería sentirme tranquila pero lo peligroso de mi tranquilidad es que anteriormente me ha sucedido que no pongo barreras y cualquiera puede venir, hacer lo que se le venga en gana con mi tiempo y mi fuerza y yo se los permito sin a saber bien porque.


Por ejemplo, hace un par de meses hable con C acerca de aquello del robo de mis cuentas de correo electronico hace más de 6 años, le pregunte por qué lo hizo para yo entenderla, perdonarla y dejar mi renuencia de confiar en ella, al menos ser su amiga honestamente... La verdad es que no me dio una respuesta que me ayudase, pero haciendole la pregunta y mirando su olvido de la situación, su "eso ya quedo en el pasado" comencé a llorar y me di cuenta de cuanto me dolía aún aquello y de cuanto la odiaba todavía. Aquella tarde también me percate de cuanto odiaba a J por permitir aquello, jamás decirmelo, hacerme "olvidarlo", jamás protegerme después de ello y hacerme pasar página mientras vez tras vez me ha sometido a pruebas de confianza en donde yo siempre salgo inmerecedora, culpable y desprotegida como en aquella ocasión.


El problema es que ya no basta un perdón por parte de ninguno, no me basta pasar página y olvidarlo: el odio se ha ido acumulando y en el caso de con J la confusión: aún no entiendo porque en mi corazón sigo sintiendo amor por él y aún lo espero si todo este tiempo la que ha dado el amor he sido yo. Creo saber que aún mantengo ese amor por él porque lo entiendo muy bien y de pronto siempre lo jusifico, pero eso es injusto para mí, porque termino entendiendolo, pensando que pronto resolverá eso que tiene en sí que me hace daño y entonces cuando eso pase todo su amor y confianza se desborbará en mí, pero esta vez entendí que eso jamás va a pasar.


Esta vez estoy indispuesta a pasar por alto sus ataques y estoy indispuesta a perdonarle a costilla mía aguantandome el dolor que me causa, dejandome en silencio lo que he pasado con él  y esperando que él repare todo: esta vez voy a recordar cada pequeño detalle de mi vida con él, voy a entender el suceso y me voy a quitar la culpa: voy a recuperarme a mí misma.


En la discusión que tuve hace dos semanas con J me dijo que lo que yo escribo en mi diario son catarsis... bueno... busque en el diccionario y en wikipedia y tengo que darle la razón (haz click para ver la definición de catarsis), pero aún así creo que se sigue quedando en la superficie del asunto y parece creer que todo lo hago pa chingarlo, o desprestigiarlo, pero la neta que no.


El plan de escribir todas estas cosas aquí en mi diario es porque hace poco más de dos años, cuando trabajaba con Eduardo, llego el punto en que me di cuenta que mi diario era aquella cosa que para otros son las pláticas con los amigos o la terapia psicologica, y por primera vez pensé que podría ahorrarme el psicologo, reparar mi broncas, entenderme a mi misma y medio entender a los demás si volvía a escribir mis sucesos ahora con un carácter analítico.


Me gusto el modo en que Eduardo manejaba sus sesiones, modo que después te platicaré, pero la manera en que él tomo la noticia de que me saldría de las sesiones para comenzar a arreglar mis problemas no fue nada linda, y la neta me metio culpa. Esperaba su apoyo y su comprensión, más que nada porque yo aún queria seguir trabajando con él en el proyecto de página web, esto ya te lo platicaré con más detalle, pero la cosa fue que en verdad me metio la idea de que "yo quería robarle su trabajo" -¿o sea cómo?- en fin... que esa culpa me hizo restringirme aún más el hablar de mis broncas aquí porque si yo osaba utilizar uno de sus términos para explicarme mejor, porque de hecho le aprendí mucho, yo ya sentía "que le estaba robando su trabajo". El suele hablar de traiciones y de gente que tomaba terapia con él y que después de un rato solo tomo parte de su labor y entonces creo una cultura o propuesta psicologica con los mismos valores que él le enseño y sólo le pusieron un nuevo nombre sin darle jamás su crédito; y bueno... tanto hablaba de ello que cuando yo le dije que iba a arreglar mis problemas sola insinuo que yo haría eso mismo y me la creí.


Para ese momento yo ya me había percatado que todo aquello de lo que él hablaba ya lo conocía: yo ya lo había identificado antes en mis notas de mi diario, aquellos que tire, pero igual tampoco les había puesto nombre y cuando lo conocí y conocí sus ideas me dije eureka! Este hombre si sabe de que se trata esto, así que quise formar parte de su equipo pensando que ellos apreciarian que yo observase el mundo como ellos y que yo solamente necesitaria conocer sus conceptos para trabajar en un proyecto comunicacional con ellos, pero me equivoque: a pesar de sus analisis y  conceptos y mapas aún les faltaba mucho para confiar en la gente y Eduardo más que nadie vio mi genuino interés y prestancia para trabajar como una negociación en la que yo estaba dando mi trabajo casi gratuitamente para robarle todas sus ideas y venderlas por mi cuenta como otros ya habían hecho... WTF? Creo que igualmente no ayudo aquello de que yo con sus conceptos por fin hubiera podido armar un proyecto de tésis (para mi titulación) que me gustaba.


Y bueno, el hecho de yo haber descubierto los nombres de mis ideas en sus conceptos, las ganas de querer resolver mis broncas sola para ahorrarme dinero y esfuerzo, así como la construcción del indice de mi tésis me hicieron creer que realmente le estaba robando algo y me ha costado tiempo darme cuenta que no es así. Como te dije de esto te hablare con más detalle, pero lo que quiero que entiendas tú y cualquier otro que me lea es que las cosas que estoy vaciando aquí no vienen de una simple gana de poner en mal a nadie. Tal vez los siguientes argumentos serían no eres psicologa para poder autoanalizarte y hasta los mismos psicologos buscan a otros psicologos para sacar sus broncas, pero la neta debo confesarte que ya no confio en ningún psicologo: en mi experiencia son manipuladores, desconfiados, proyectan sus propios miedos en ti, quieren hacerte pensar una cosa que no es solo porque ellos lo creen así y en fin... No confío en los psicologos.


Por otra parte me retumba una cosa, despues de este tiempo, de aquello con lo que Eduardo me despidio: "pues si no has trabajado nada, Gabriela, solo vienes, me dices que estás bien y los problemas que sacas son cotidianos" "cotidianos", en el contexto de la plática aquello me hizo darme cuenta que mis problemas eran insignificantes para él... mmmh... ¿por qué no podrían serlo para otros? Me dolio porque yo sentía que estaba teniendo gran avance en esto de poner límites y recobrar mis verdaderas intensiones, yo estaba entendiendo perfectamente todo pero en ese momento entendí que si no había querido contarle más era por temor a que me dijera justamente que mis problemas eran insignificantes, y creía percibir esa opinión en cada sesión con él: no me equivoque, finalmente me lo dijo. Creo que esperaba que le llegara con un cancer o una violación bloqueada en mis recuerdos... pero que te digo? No l@s tengo.


En fin que yo deseaba seguir asistiendo a sus cursos para poder aplicar cada una de sus enseñanzas en mi vida dandole el crédito, y trabajar con él para sacar su labor al público, pero después de salir de las terapias sus palabras fueron tan negativas, y tan... aún no encuentro la palabra, sabes? El punto es que puso en mi tantas intensiones supuestas que simplemente me sentí desterrada de sus enseñanzas, y al poco tiempo me desterraron del proyecto de pagina web...


De todos modos con aquella experiencia entendi algo, había una cosa mal en sus sesiones: ese afán de ponerle una intensión determinante a quien te ataca cuando no sabes si realmente esa es su intensión. Vaya, no sé si me entiendas, pero el punto de sus terapias era aprender a vivir en la realidad y el hecho de que nos hiciera colocarle una intensión a las otras personas tenía sus pros y sus contras. ¿Por qué? Bueno, en realidad colocar una intensión a alguien y darla por cierta te ayuda a avanzar porque te da algo firme en qué pararte: cuando tú decides que alguien hizo una cosa por cierta "otra cosa", puedes tomar una decisión a partir de, por lo que te deshaces de la confusión y de ahí en adelante solo tomas decisiciones consecuentes y congruentes a aquello que has tomado como cierto. El problema es ¿qué pasa si aquello que creias cierto no lo es? Deja: tu primera reacción será negar esa realidad "alternativa", puede que la tomes como mentira y que simplemente decidas seguir siendo congruente con la realidad que ya te habías creado, pero ¿que pasa si justamente decides seguir creyendo en esa realidad que TÚ supusiste? Ahi empieza lo tragico: Vas a comenzar a provocar daño a quien vive en la realidad real y en uno de los panoramas más cabrones cada que se te presente una situación que se asemeja a la situación de poner una realidad supuesta vs una realidad real, seguirás recurriendo a la realidad supuesta: a tus suposiciones y nada más que a tus suposiciones. Y bueno... naturalmente vas a crear daño, pero pa que me entiendas en esta idea caben los prejuicios y las predisposiciones. Es bajo este mecanismo que coloquialmente decimos "todos los hombres son iguales" o "tú me vas a hacer lo mismo que x"... ¿se entiende?


Bueno, la cosa es que yo decidi tomar esa manera de "sacar mis asuntos" que Eduardo proponía con la variante de que siempre utilizaré el "tal vez", el "quizás", el "yo opino" "yo digo" "yo supongo" "yo creo"... Pensé que quien me leía alcanzaba a entender que usando estas particulas yo asumía que lo que estaba diciendo podía no ser real y que me hacia responsable de que el juicio o determinación que me estaba ayudando a avanzar era un supuesto lanzado hacia afuera con el riesgo de no ser cierto y el deber de cambiar en caso de que se descubriece lo real... Tambien pensé que estaba claro mi fin al escribir mis broncas aquí pero con la discusión que tuve con Juan entendí que no estaba claro. En fin... esa narración sigue pospuesta., lo que me interesa es ¿has entendido tú, ya, cuan importante para mi es escribir en este tiempo? Quedará más claro cuando te explique lo que me enseño Eduardo y te platique más sobre lo que paso ahí, pero bueno, así la cosa.


Ah, sí! Queda algo más, ¿por que seguir escribiendo en público y no en privado? Bueno eso tiene que ver con algo que pasó con Juan hace un tiempo, tambien tiene que ver con el hecho de que en realidad me gusta pensar que no estoy sola en esto, tambien con el hecho de sentir que no estoy siendo espiada sino que yo cuento mis cosas porque quiero... y en fin.... Es una historia un poco larga que tambien quiero contarte y digamos que es un evento que amerita una "sesión diariapeutica" (jajajajajajajajajajaja "diariapeutica" lindo nombre)


En fin, spero poder escribir al menos una vez a la semana y contarte tanto de mi vida cotidiana como sacar mis "eventos" a resolver. Ah, sí! Esa palabra de "eventos" es como Eduardo le dice a aquellas cosas que te dejaron "marcado", pero si, como te dije eso te lo cuento cuando te hable al respecto, va? Bueno, ahora sí me despido por el momento.


Te mando un beso! Oh... sí... y el video de hoy... Sabes? Es que en la discusión con Juan me di cuenta que esta vez el hecho de sacar cada situación para resolverla para mí significa que esta vez me odiara verdaderamente, y es definitivo que ya no lo volveré a ver: no hice las cosas como él normalmente las quiere y espera, pero... ya era hora. En fin... esta canción me habla de eso en estos momentos: resolver aquí mis ondas significa que esta vez Juan no volverá y estoy dispuesta a que eso pase...









Ahora sí, beso!!